River ganó un partido con la mente en otro. Porque aunque vaya puntero en el torneo, el termómetro de su año (al menos del primer semestre) lo medirá en su participación en la Libertadores. Por eso, el triunfo de un equipo alternativo ante Argentinos 2-1, fue un casi pasatiempo hasta que llegue el miércoles y enfrente a San José de Oruro y se defina su clasificación a los octavos de la Copa.
Marcelo Barovero, representante de los pocos titulares que jugaron volvió a ser clave. Fernando Cavenaghi, que encabezó a los suplentes, también lo fue. El delantero definió al primer palo un mano a mano y puso a River arriba. La pelota entró por el frente del arco y salió por atrás, gracias a una endeble red que volvió a romperse en el empate del “bicho”.
Con poco, River había complicado al local pero Néstor Gorosito quería redimirse. El 2 de abril, eligió una remera con la bandera de Inglaterra para lucir en un programa de televisión. No fue la mejor selección de vestuario pero esta vez se superó. A los 55’ eligió a Lautaro Rinaldi para vestir a su equipo y a los 57’, el juvneil lo empató con una extraña pirueta.
Pero si hablamos de particularidades, Lucas Boyé se queda con todo. El delantero no pudo volver de México junto al plantel porque perdió su tarjeta de migración. Anoche, con todos los papeles en regla, marcó el gol del triunfo, algo que no hacía desde hace seis meses.