BUENOS AIRES.- La diputada de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, oficializó este jueves su precandidata presidencial dentro del espacio Cambiemos y pronosticó que triunfará en las PASO sobre sus competidores internos, Ernesto Sanz y Mauricio Macri, sin propaganda, sin afiches y sin sobresalir.
Un día después de haber abandonado un sanatorio de Recoleta donde estuvo internada desde lunes por un sorpresiva disminución de potasio, Carrió encabezó un festejo por el Día de la Independencia en el Palacio San Miguel del centro porteño, donde remarcó que "ya ganó la República" ante unos 500 simpatizantes que pagaron $ 250 el cubierto para colaborar con la campaña.
Sobre el escenario, sentada en una silla por encontrarse todavía débil, la líder de la Coalición Cívica inauguró formalmente sus actividades de campaña, auguró que el próximo presidente no va a ser nadie del PJ.
Con su habitual estilo, Carrió también le imprimió misticismo a sus palabras y recomendó a sus simpatizantes "caminar sin miedo y dejar atrás los dolores y entregarlos a la cruz de Cristo, a Buda, a la humanidad" y definió la celebración del 9 de julio como el "Día de una nueva independencia nacional".
El futuro en Capital Federal
Además, la precandidata se refirió a la segunda vuelta en la Ciudad de Buenos Aires y manifestó un tibio respaldo al candidato a jefe de gobierno por ECO, Martín Lousteau.
"Obviamente voy a votar a Lousteau, pero ahora ya estoy dedicada a mi campaña", aclaró y agregó que está "saliendo a recorrer el país rumbo al norte y solo voy a detener mi campaña para asistir a la sesión del miércoles y para venir a votar el domingo 19".