Se paró frente al atril. Miró hacia el público, repartió un par de besos y saludos. Se puso los anteojos que sacó de su bolsillo y comenzó a leer su último discurso como gobernador en el acto por el 9 de Julio. Fue la duodécima vez que lo hizo. La primera, sin embargo, en la que pronunció párrafos con fuertes trazos kirchneristas. A 40 días de las elecciones y a tres meses del fin de su tercera -y última- gestión, el gobernador, José Alperovich, evocó a Néstor Kirchner en tres oportunidades, las mismas veces que agradeció a la Presidenta, Cristina Fernández. También recordó a Juan Domingo Perón. Mencionó y halagó las políticas que son “banderas” de la Nación. Con los precandidatos a Presidente y a Gobernador, Daniel Scioli y Juan Manzur en el escenario, prometió “un fuerte respaldo en las urnas”.

“Nacional y popular”

“Siento un enorme orgullo de haber formado parte del proceso que inició Néstor Kirchner en 2003 y que hoy continúa usted, presidenta. Retomaron el camino de independencia que abrieron nuestros próceres. Ese fue también el legado que dejó Juan Domingo Perón, cuando el 9 de Julio de 1947 declaró en Tucumán la independencia económica. Como gobernador, puedo decir que me siento orgulloso de haber cumplido con mi deber”, comenzó el mandatario. Remarcó que esta era su última vez y los “no” brotaron en el público. Alperovich sonrió. Su esposa, Beatriz Rojkés, desde el estrado, tiró besos y agradeció a los militantes que gritaban.

Alperovich recordó que Kirchner negoció para reducir la deuda externa y “liberarnos de las recetas del FMI”. Consideró que Fernández siguió con esa “tradición nacional y popular”: “no cede a la voracidad de los fondos buitre que ponen en peligro las condiciones de vida de nuestro pueblo”. Enumeró y halagó las que, afirmó, eran acciones por la “soberanía política” como la Asignación Universal por Hijo y la Ley de Medios.

Criticó a la oposición que propicia “un cambio”: “a esos sectores les pedimos que digan qué quieren cambiar ¿Las políticas sociales y económicas? Quieren volver a los 90, a las privatizaciones y los ajustes”. A continuación, instó a defender y a luchar para que el “verdadero cambio que comenzó en 2003” se profundice. “Voy a seguir trabajando desde el lugar que me toque. Estoy seguro que de las urnas va surgir un fuerte respaldo a los hombres y mujeres comprometidos con la salud, la educación, la vivienda y el trabajo”, prometió. Cerró sus palabras con la frase de campaña del oficialismo local: “hacia la Victoria”.

Sándwiches y bebidas abandonadas

Frente al escenario, cerca de las vallas que separaban los espacios entre militantes y la prensa, quedaron sembradas bandejas con sánguches y botellas de gaseosas y agua (foto superior). Fueron parte de los refrigerios que repartieron los dirigentes a los asistentes tanto del interior como de la capital.

Empanadas y colaciones para los funcionarios

Los funcionarios nacionales se llevaron cajas con regalos regionales. En los paquetes, había empanadas congeladas y dulces elaborados en Tucumán como colaciones, nueces confitadas y tabletas de dulce de leche. Además, para el avión Tango 01 se prepararon 750 empanadas calientes. Sucede que la mayoría de los funcionarios, entre el viaje y las actividades, no tuvo tiempo de comer. En la sala VIP del Aeropuerto, ubicado en Alderetes, el encargado del catering fue el intendente local, Julio Silman. Sándwiches y masas esperaron a quienes fueron llegando.