BUENOS AIRES.- "Dos jugadores me dijeron 'sacalo a Caruzzo porque lo van a echar'. Pero yo no puedo sacarlo por eso. Matías ya había sido expulsado por Silvio Trucco en un partido como local contra Lanús. Pero no puedo sacarlo porque algunos escucharon que lo van a echar si seguía hablando". Con esas palabras, en caliente, Edgardo Bauza se refirió al árbitro del partido que su San Lorenzo empató con Godoy Cruz y que le impidió sumar de a tres para ser líder o único escolta.
"Si este partido era normal, creo que lo ganábamos. Más después de pasar el primer tiempo malo que tuvimos", entendió el entrenador que se tuvo que conformar con un segundo puesto compartido con River, a tres de Boca.
"Trucco no estuvo tranquilo, como otras veces. Cuando se quejan los 22, por algo será... La pelota estuvo tanto por arriba y hubo tantos roces, que el jugador comienza a ponerse nervioso. En el vestuario, estuve tratando de calmar a jugadores como Yepes y Mercier", dijo el "Patón" en llamas, justificando el resultado con una mala actuación del hombre de negro.
"Se equivoca con la primera expulsión -Caruzzo-. Dijo que fue una falta táctica, y para mí no fue ni falta. Fue un choque de hombro con hombro. Eso condicionó todo el partido. Tuve que sacar un delantero para poner a Cetto. Después, viene la otra expulsión y el penal", siguió lamentándose sin lograr mentalizarse en lo que viene (Gimnasia de La Plata), que puede volver a depositarlo donde pretende. Tranquilo, "Patón".