BUENOS AIRES.- El juez federal Sergio Torres ordenó al Servicio Penitenciario Federal (SPF) que los hermanos Martín y Christian Lanatta y Víctor Schillaci, recapturados tras permanecer 15 días prófugos, se mantengan aislados y no tengan contacto con otros detenidos en causas por narcotráfico en el penal de Ezeiza, informaron fuentes judiciales.
Esta medida obedece a las sospechas de los investigadores acerca de la posibilidad de que organizaciones vinculadas al narcotráfico puedan suministrar algún tipo de información o asistencia a los recapturados, o bien que puedan atentar con la vida de los mismos. Por eso, el juez Torres le pidió al SPF que los tres presos permanezcan aislados y que no tengan contacto con otros detenidos por causas relacionadas a la venta de drogas, entre ellos el llamado "Rey de la efedrina", Mario Segovia, y otro recluso de nacionalidad ucraniana llamado Yury Kepich, que si bien está detenido por un homicidio se lo investiga también en una causa por narcotráfico.
Por otra parte, el fiscal federal Jorge Di Lello pedirá nuevas medidas de prueba en la causa que investiga un vínculo del narcotráfico con la fuga de los prófugos. En la fiscalía de Di Lello se evaluaban "pruebas que se pedirán o que podrán producirse", antes de emitir un dictamen respecto del planteo de la defensa de Martín Lanatta, quien pidió que el juzgado de Torres unifique todas las causas abiertas a raíz de la fuga.
En tanto, uno de los abogados de Lanatta, Humberto Próspero, denunció hoy en el juzgado de Torres que se agravaron las condiciones de detención de su defendido en el penal de Ezeiza. El letrado presentó un escrito en el que consideró que alojar a Lanatta en el llamado módulo 3 del penal "fue un agravamiento" porque permanece aislado de otros reclusos en lo que se llama "buzón". (Télam)