BUENOS AIRES.- La denuncia de 290 páginas que el fiscal Alberto Nisman le hizo llegar al juez Ariel Lijo y que iba a presentar en el Congreso contra la entonces presidenta de la Nación, Cristina Fernández, y otros grupo de funcionarios y personajes de apoyo contenía una trama basada en el supuesto encubrimiento a Irán en la voladura de la AMIA, a partir del Memorándum de Entendimiento, que se había firmado en 2013.
Para Nisman, que fue particularmente duro con la ex Presidenta, detrás del pacto se ocultaba "un plan criminal dirigido a procurar la impunidad para todos los imputados iraníes, creando instancias que puedan desligitimar complemente las acusaciones de la justicia argentina respecto de todos ellos. Con su sola letra, el memorando tiene la potencialidad de desligitimar las conclusiones a las que la justicia argentina arribó siguiendo las pruebas obtenidas y conforme a derecho".
En su denuncia, el fiscal imputó también al canciller Héctor Timerman, al diputado camporista Andrés "Cuervo" Larroque, al dirigente piquetero Luis D'Elía, al jefe de la agrupación Quebracho, Fernando Esteche, al ex juez de Instrucción y ex fiscal federal, Héctor Yrimia, al ex agregado cultural de Irán en Argentina, Mohsen Rabbani, y al referente de la comunidad iraní Jorge "Yussuf" Khalil, por haber supuestamente cooperado para montar "una conexión local falsa" para desvincular a los prófugos iraníes acusados de perpetrar el atentado de 1994.
En su escrito, el fiscal aseguró que la jefa del Estado "negoció la impunidad con Irán" y que realizó "pactos secretos" a cambio de posibles acuerdos comerciales, mientras pedía que se los citara a indagatoria y solicitaba el embargo de sus bienes, apoyado en grabaciones de conversaciones telefónicas.
"Vaya ironía"
"Vaya ironía. Una Presidente que públicamente se ha regodeado manifestando a los sobrevivientes y a los familiares de las víctimas su compromiso en la búsqueda de verdad y justicia, que ha declarado que su gobierno no permitirá que se use el caso AMIA en el ajedrez de la geopolítica mundial, que ha tomado cartas en el asunto porque la causa estaba paralizada; fue, en realidad, la principal artífice, junto con el canciller Timerman, de la fraudulenta desarticulación de la investigación y del encubrimiento de estos acusados", escribió Nisman.
"En el discurso se habló de justicia y verdad. En los hechos se acordó impunidad. Pasmoso. Da pavor, entonces, constatar que todo se ha tratado de actuación y manipulación de hechos y personas y, más aún, de acciones delictivas", añadía después. Más adelante en su denuncia, describió a "Yussuf" Khalil como "el referente más importante de las autoridades del régimen iraní en Argentina" y representante de "la diplomacia paralela que comunica Buenos Aires con Teherán, que fue aprovechada para la consecución del plan de impunidad", del que "mantuvo constantemente informado de cada avance del plan al prófugo Mohsen Rabbani". (DyN)