BRASILIA.- En una estrategia destinada a conseguir apoyo internacional contra su impugnación, la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, denunciará en Estados Unidos que está siendo víctima de un golpe en su país, donde enfrenta un pedido de apertura de juicio político (impeachment), informaron medios locales.
Según el portal del diario Folha de Sao Paulo, Rousseff aprovechará su intervención en la ceremonia de mañana en la que se firmará el acuerdo de París para detener el cambio climático, que se realizará en la sede de la ONU, en Nueva York, para hacer un llamado a la comunidad internacional contra el proceso de impeachment, que a su entender es ilegítimo.
La Presidencia brasileña dijo que es “muy probable” que la mandataria participe del evento, lo que hasta el martes no estaba previsto, pero no confirmó el tenor del discurso que pronunciaría. Sin embargo, cambió de idea durante la noche del martes, en una reunión con asesores y colaboradores en el Palacio del Planalto y ayer terminó de definirse y optó por viajar, consignó la versión on line de Folha.
Dilma viajará esta noche y regresará mañana, inmediatamente después de participar de la ceremonia, explicó el portavoz del Palacio del Planalto.
Según “Folha”, Rousseff -en su discurso que duraría unos cinco minutos- citará la importancia del acuerdo mundial alcanzado en París en 2015, cuando 192 países pactaron reducir la emisión de gases contaminantes, y resaltará las conquistas que Brasil ha logrado en esa materia en los últimos años.
Paralelamente, aprovechará para dar su versión sobre el juicio político en su contra, que ya fue avalado por la Cámara de Diputados y ahora está en análisis en el Senado.
Los temores
Según el portal del diario ‘O’Globo’, aliados de Temer manifestaron preocupación ante la posibilidad de que Rousseff lo denuncie como “golpista” ante el mundo, y dijeron que preparan una contraofensiva a nivel internacional para defender al político de las acusaciones.
Entre las estrategias previstas, está la de que Temer, al igual que como hizo Rousseff el martes, conceda una rueda de prensa a medios internacionales con el fin de dar su versión sobre los hechos.
El pedido de apertura de un juicio político contra Rousseff se basa en la presunción de que la mandataria violó la Ley de Responsabilidad Fiscal, al practicar maniobras contables que habrían servido para maquillar la verdadera situación económica del país.
Rousseff asegura que esas prácticas no implican delito personal cometido de su parte, y que todos los Gobiernos las han realizado.
Los juristas están divididos respecto de si la confirmación de la existencia de ese tipo de actos es suficiente para destituir a un Presidente.
‘Folha’ sostiene que el senador Aloysio Nunes, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) -el mayor opositor del Gobierno-, está en Washington para tener una serie de reuniones con autoridades estadounidenses, con la finalidad de refutar los argumentos del Gobierno de que el impeachment es una maniobra “golpista”. Entre otros, Nunes, quien preside la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, se reunirá con el subsecretario de Asuntos Políticos del Departamento de Estado, Thomas Shannon.
En esta última semana, Temer llamó al senador para manifestar su indignación con las declaraciones de Luis Almagro, secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), y de Ernesto Samper, secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur). (DPA-Especial)