BUENOS AIRES.- La ex presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, reiteró ayer que no tiene temor de ir presa por las causas que la Justicia lleva adelante en su contra, a la vez que criticó al Gobierno encabezado por Mauricio Macri.
“Con esta Constitución, este Código de Procedimiento y este Código Penal, evidentemente que no”, respondió la ex mandataria ante la consulta de radio Mitre sobre si teme quedar detenida en el curso de alguna de las cuatro investigaciones judiciales en su contra.
En diálogo con los medios presentes, en el velatorio de los restos del ex dirigente sindical Raimundo Ongaro, la ex mandataria pidió que “no distorsionen las palabras” del ex ministro de la Corte Suprema de Justicia, Eugenio Raúl Zaffaroni, al ser consultada por supuestos dichos del jurista sobre la posibilidad de que ella pueda ir presa.
Lo que dijo Zaffaroni es que “si se agrava la situación económica y el Gobierno quiere distraer a la opinión pública, puede suceder eso. Si se agrava la situación económica del país, no le cambien las palabras a Zaffaroni”, agregó.
La ex jefa de Estado cuestionó también al Gobierno de Macri porque “quiere armarle causas penales a todos aquellos que ellos piensan que pueden ser candidatos u obstaculizarles una elección” en el futuro.
“La idea, por lo que también le está pasando a otro dirigente de nuestro espacio político que fue candidato a presidente, me parece que lo que esta gente quiere fundamentalmente es armarle causas penales a todos aquellos que ellos piensan que pueden ser candidatos o pueden obstaculizarse una elección”, expresó en relación a las denuncias contra el ex gobernador bonaerense Daniel Scioli.
Cristina relativizó las diversas denuncias contra ex funcionarios del kirchnerismo al argumentar que el Gobierno de Macri “todos los días saca un conejo de la galera para distraer a la gente de la situación económica” actual.
Querellantes
En tanto, el juez Claudio Bonadio aceptó ayer que familiares de las víctimas del atentado a la mutual judía AMIA en Buenos Aires sean querellantes en una causa contra Fernández de Kirchner, en la causa abierta a partir de una denuncia contra el ex canciller Héctor Timerman por presunta “traición a la patria”, y todos los legisladores que en el Parlamento apoyaron un acuerdo de entendimiento con Irán.
Esta decisión el juez Bonadio fue leída como un posible impulso para reabrir la denuncia del fallecido fiscal Alberto Nisman contra Cristina Fernández que, en rigor, se encuentra en manos del juez Daniel Rafecas, que la desestimó, en un acto que luego fue confirmado por la Cámara Federal. En enero del año pasado Nisman acusó a la ex presidenta de encubrir a Irán en el atentado a la AMIA en 1994, donde hubo 85 muertos. Bonadio buscaría llevar adelante medidas de prueba que solicitó el fiscal Gerardo Pollicita para impulsar la denuncia de Nisman.
En paralelo, la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) solicitó la reapertura de la investigación que impulsó el fiscal Nisman antes de que fuera hallado en su departamento con un disparo en la cabeza, el 18 de enero del año pasado, en un caso que aún no fue esclarecido. (DyN-Télam)