Juan Leon Parravicini tiene 34 años. Es ingeniero agrónomo y trabaja en una citrícola. Cuando tenía 29 años -ya estaba recibido y tenía trabajo- consiguió ayuda económica y partió a hacer un máster a Australia.

“Siempre había querido tener estudios en el exterior. Averigué en Estados Unidos, en Nueva Zelanda y en Australia. Me decidí por este último país y la experiencia fue fantástica. Todo está pensado para el estudiante extranjero. En el máster de agronegocios que hice tenía clases y talleres con gente de 17 nacionalidades. Compartir tantas cosas con ellos fue muy enriquecedor, te abre la cabeza”, relata el joven.

Su especialización duró un año entero, tiempo que también dedicó a conocer todo el país australiano. “Estudié con profesores de primerísimo nivel. Cambió completamente lo que hasta entonces era mi visión de la agronomía. También tuve la oportunidad de dedicarme a investigar, usando los recursos de las siete bibliotecas que había la universidad ubicada en la ciudad de Brisbane”, especifica.

Australia se ha sumado en los últimos años a la lista de países preferidos de los estudiantes que quieren hacer una beca. Se destaca por su calidad educativa y también cuenta con una ley de protección del estudiante extranjero. En general, cada vez hay más jóvenes tucumanos interesados es especializarse en el extranjero. Y Estados Unidos dejó de ser el país al que más se mira a la hora de buscar un destino académico, ya que tiene las universidades más prestigiosas. Los alumnos eligen desde Nueva Zelanda hasta cualquier país latinoamericano, pasando los destinos más exóticos. Y no importa si tienen que asumir el desafío de aprender un idioma difícil, como el alemán, el japonés o el coreano.

Esto se debe a que en el mundo entero los países están tratando de atraer interesados en estudiar en sus facultades. Por eso diseñan programas de intercambio que ofrecen desde hacer una carrera completa en una universidad, una maestría o un doctorado hasta lo más frecuente, que es cursar uno o dos semestres en el exterior.

Por qué estudiar afuera

Tal vez la característica más importante que brinda una beca es, a modo de marca registrada, aportar una diferencia importante en el currículum.

Para el empleador, significa que el postulante fue elegido entre varios, tiene un grado más de capacitación, muchas veces en universidades de renombre, una buena red de contactos y algo de mundo, explica María Laura Colque, presidenta de la Fundación para el Desarrollo Profesional.

“La generación Y no recurre a lo estandarizado, sino a lo que ellos desean. En algún lugar del mundo encuentran esa especialización y no dudan en viajar a cumplir su sueño. Con la generación de los millenials ocurre algo similar: ellos no encuentran límites ni fronteras cuando se trata de encontrar eso que están buscando para perfeccionarse. Muchos Argentinos viajan a especializarse para desarrollar su propios emprendimientos. Una opción muy buscada es España, adonde van a especializarse en el rubro Joyería”, detalla.

“Los que las empresas más valoran de los postulantes que han estudiado en el exterior es la cultura que se adquiere en otros países”, precisa Colque.

“Además de perfeccionar el idioma, la experiencia de estudiar afuera provee el desarrollo de capacidades críticas tales como diversidad e inclusión, multiculturalidad, adaptación a contextos globales, ampliación de la red de contactos internacionales”, aporta Héctor Dama, de Lee Hecht Harrison (una consultora especializada en servicios de transición de carreras).

Dama habla también de otra gran ventaja de irse al exterior: esta experiencia favorece la posibilidad de acceder a empresas multinacionales con filiales locales, dado que en estas organizaciones es frecuente la articulación de carreras locales con internacionales .

Otra perspectiva

“La movilidad estudiantil abre grandes oportunidades, que van desde poder aprender un idioma de forma mucho más ágil que en un aula, hacer amigos en otras parte del mundo, aprender de otras culturas hasta tener otra perspectiva de tu propio país”, sostiene Eduardo Ricobelli, director del Área Extensión y Relaciones Institucionales de la Unsta.

“Para una universidad también es importantísimo que sus alumnos se vayan un tiempo a estudiar afuera. Lo que pueden traer desde el exterior enriquece muchísimo un aula. Por eso es que siempre cuando analizamos el perfil del postulante vemos que tengan una actitud de solidaridad, vemos si están decididos a compartir lo aprendido a su regreso”, precisa.

Gustavo Santamarina, director de Relaciones Internacionales de la UNT, puso en números esta creciente tendencia de los alumnos a realizar estudios en el exterior. En los últimos años más de 350 alumnos viajaron gracias a los distintos programas de becas. Si bien la mayoría tuvo como destino los países del Mercosur, también hubo un gran número de interesados en perfeccionarse en Europa.

A Corea

"La beca me ayudó a crecer, me hizo sentir que se puede mejorar"


En 2013 Mayra Benavidez (23) ganó una beca y se fue a estudiar a Corea del Sur. “Desde hacía años seguía la cultura de ese país. Me llamaba mucho la atención el estilo de vida de su sociedad y su historia, así que me puse a estudiar el idioma y al poco tiempo salió la posibilidad de hacer la beca de intercambio cultural y relaciones internacionales. Allá tomé clases de coreano, historia y sociedad, y economía, a cargo de prestigiosos profesores de Oxford-de nacionalidad Coreana. El curso tenía como objetivo generar nuevos líderes. Lo que más me gustó fue la calidad de gente que se eligió como beneficiaria la de beca; la mayoría hablaba tres idiomas. Había alumnos de todas partes del mundo. El intercambio cultural fue muy intenso. Lo que más me impactó fue el hecho de convivir y darnos cuenta de que el mundo sí puede vivir en paz. Más allá de lo que esta experiencia puede aportar a mi curriculum, me hizo crecer como persona. Si hay algo que aprendí en Corea es que sí se puede cambiar y mejorar”, señala la joven, que es técnica en sonorización y estudia licenciatura en Inglés.

A Alemania

"Estar rodeada de diversas identidades es un reto constante"

El primer sueño que tuvo Pola Schiavone fue estudiar un posgrado en Irlanda. “Lamentablemente, las cifras eran impagables y desistí. La posibilidad de irme a Alemania llegó de forma inesperada y con tiempo aprendí a conocerla, a hablar su idioma y a enamorarme de esta posibilidad que apareció”, cuenta la joven. “Llegué a Colonia gracias al convenio que esta universidad tenía con Filosofía y Letras de la UNT. La experiencia es maravillosa y enorme. Hay una gran circulación e intercambio de estudiantes y gente de todas partes del mundo. El idioma alemán me parece grandioso, pero sigo intentando dominarlo, y cada vez que aprendo algo nuevo, se me revela una faceta de esta gente y su cultura. Establecerme en este país ha supuesto enormes desafíos personales. Hoy por hoy, estoy amoldada a esta vida. Europa es un continente magnífico. Tener la posibilidad de viajar a distintos países con relativa facilidad, estar constantemente rodeada de identidades diversas, es un reto constante y fabuloso. Esta vida es inspiradora, te abre la mente”.


OPCIONES


Esta es una guía de algunas de las becas disponibles. Algunas de ellas cubren todos los gastos, otras en forma parcial. Los postulantes deben manejar el idioma del país al que quieren ir
Esta es una guía de algunas de las becas disponibles. Algunas de ellas cubren todos los gastos, otras en forma parcial. Los postulantes deben manejar el idioma del país al que quieren ir.

PAISES VECINOS- “Escala” es un Programa de Movilidad Estudiantil en el marco de de la Asociación de Universidades del Grupo Montevideo (AUGM). Desde el 2004 a la fecha viajaron 140 becarios de la UNT a universidades del grupo, en Brasil, Uruguay, Chile, Paraguay.

A MÉXICO.- “Jima” es un Programa de Movilidad Estudiantil de Jóvenes Investigadores de México y Argentina (JIMA). Desde 2011 viajaron 24 becarios de la UNT a universidades de México.

POR EL MERCOSUR.- El programa “Marca” tiene reconocimiento académico en el marco de las carreras acreditadas a nivel Mercosur Destino: Brasil, Bolivia, Paraguay, Chile y Uruguay.

EUROPA y otros.- La UNT ejecutó dos programas “Erasmus Mundus” de la Unión Europea, los cuales permiten la movilidad de estudiantes de grado, postgrado y docentes desde Argentina a diferentes países de Europa. Se trata de becas completas para los ganadores. Hasta ahora, alumnos viajaron a estudiar a España e Italia. Además, la casa de altos estudios tiene firmado convenios bilaterales con universidades extranjeras de Francia, Alemania, Austria, España, Brasil, Estados Unidos, Suecia y Perú. En estos casos, la UNT solamente brinda la cobertura académica, mientras que a cargo de los alumnos está la manutención, pasaje y seguro. En algunas excepciones, la universidad receptora brinda una ayuda económica para alojamiento y manutención y la UNT brinda una ayuda económica para los pasajes.

A BRASIL POR UN SEMESTRE.- La Universidad del Norte Santo Tomás de Aquino (UNSTA) tiene convenio con varias facultades del exterior. Brasil es uno de los destinos más elegidos por los alumnos. La beca consiste en cursar un semestre en una facultad de ese país vecino. Los destinos son Río de Janeiro, Brasilia, Recife y Porto Alegre (los alumnos reciben una ayuda de 3.000 euros).

INVESTIGADORES.- Otra opción que tiene la UNSTA es para jóvenes investigadores. Los postulantes tienen que tener menos de 35 años y contar con un proyecto de investigación para realizar en un país europeo. Si reúnen las condiciones reciben una ayuda de 5.000 euros. En este caso la estadía mínima es de dos meses.

AL REINO UNIDO.- La Beca Chevening es una de las más famosas. Se trata de un programa del Gobierno Británico que ofrece estudiar un posgrado en el Reino Unido. Los postulantes deben ser estudiantes de los últimos cursos y graduados de carreras afines a Economía; Ciencias Políticas; Derecho; Arquitectura y Urbanismo; entre otras. Este es un programa destinado a Políticas Públicas. La beca cubre todos los gastos.

ESPAÑA Y EE.UU.-Otras dos becas famosas son la que ofrece cada año la Fundación Carolina a estudiantes iberoamericanos para que realicen cursos en España y la beca Fulbright, que es una convovatoria para graduados de universidades públicas y privadas que deseen hacer una experiencia académica internacional en EE.UU. , adonde pueden cursar un Master o Doctorado.

PARA TENER EN CUENTA.- ¿Qué es lo que más valora para otorgar una beca? Un buen nivel del idioma del país en el que quiere estudiar, una buena nota media de la carrera, cartas de recomendación y, en algunos casos, un proyecto interesante relacionado con los estudios que se cursarán.