BRASIL.- Michael Phelps dice adiós. El nadador estadounidense insistió en que no volverá a competir nunca más después de poner fin a su carrera en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
"No más. He colgado el bañador de competición y no me lo vuelvo a poner", sostuvo el deportista más exitoso de la historia del olimpismo en una entrevista publicada hoy por el diario español "Marca".
Phelps, de 31 años, cerró su trayectoria como profesional en Río sumando otros cinco oros y elevando a 23 su número de medallas doradas conquistadas desde su debut en Sydney 2000.
El estadounidense se retiró por primera vez después de los Juegos de Londres 2012, pero después anunció su regreso. Poco después ingresó en una clínica de desintoxicación por sus problemas con el alcohol y los superó para agrandar su leyenda en Río 2016. "Cuando un atleta deja su deporte después de unos Juegos, pasa por un tremendo bajón y todos necesitan que les ayuden. Y es lo que la gente tiene que entender, que aunque haya pasado por la alta competición no está todo hecho", explicó.
"Es un error. Yo lo intenté y es un gran desafío, pero en este momento de mi vida, con lo que he vivido y he sido capaz de superar en los dos últimos años, y con una familia, cambia mucho", añadió Phelps, padre de un niño y que se casará a finales de año.
Con la confirmación del retiro asegurada, a Phelps le preguntaron cuál es su medalla más especial. Y respondió: "yo las aprecio igual a todas. Juntas pesan 16 o 17 libras (unos siete u ocho kilos)". (DPA-ESPECIAL)