En un mundo sobrepoblado, el cuidado de los recursos energéticos, la necesidad de cuidar el planeta, los requerimiento de seguridad y la búsqueda de un máximo confort son temas de preocupación diaria en nuestros hogares. Hoy, la tecnología nos permite brindar una respuesta a estos interrogantes de la mano de la domótica, permitiendo centralizar, automatizar y optimizar el funcionamiento integral de las viviendas.
En una entrevista que realizó el portal de noticias Infobae.com al jefe de operaciones de Life2Better, empresa especializada en desarrollos tecnologicos, Sebastián Aued, hablo sobre esta tendencia.
-¿Qué es la domótica?
Es la tecnología puesta en función del control y de la automatización inteligente de una vivienda. Con ella se puede reducir el consumo energético, maximizar la seguridad y elevar el confort. Todo controlado desde el lugar del mundo en el que uno de encuentre.
-En un corto plazo, todo va a ser inteligente: las ciudades, las casas, los objetos. ¿Cuál es la transformación que veremos en nuestro día a día?
La domótica es una realidad, es parte del día a día. Apuntamos a que, en el corto plazo, el común de la gente disfrute de sus beneficios. Una casa domótica tiene la posibilidad de ajustarse al entorno y tomar las decisiones como podría hacerlo uno mismo. Apuntamos a que en unos cinco años, esta tecnología tenga una explotación parecida a lo que fue la del smartphone; que deje de ser exclusiva y que sea parte de la vida cotidiana.
-¿Podrías mencionar ejemplos concretos de aplicación de la domótica?
Se puede automatizar el encendido de luces para que se apaguen automáticamente cuando no detecta movimiento en una habitación y se puede configurar para que las luces se encienden solamente si la iluminación ambiente lo requiere. También se puede disminuir el consumo de luz bajando la intensidad y las personas no se darían cuenta. A su vez, todo lo que es calefacción centralizada puede ser controlada con el sistema, se pueden manejar los equipos de aire –ya sean centrales o tipo Split–. Hay un montón de configuraciones que se pueden establecer vinculadas al uso energético. No se necesita tener un tipo de luz especial, porque es compatible con todas las luces halógenas, las luces led, tiras de led RGB, etc. Es un gran ventaja comparada con otros dispositivos porque el sistema se auto adapta al tipo de luz que tiene conectada. También las cortinas se pueden automatizar para que se levanten por la mañana o que, si hay mucho sol, se bajen solas.
-¿Tenemos que construir nuestra casa desde cero para poder hacerla inteligente?
No, en absoluto. Claro que es más fácil y que hay cosas que son complicadas de incorporar si la casa ya está edificada. Sin embargo, hay un montón de soluciones que se pueden agregar a una casa ya construida. Existe tecnología inalámbrica que se compone de un controlador central y varios módulos muy pequeños -que se pueden conectar detrás de los tomas eléctricos o detrás de los artefactos -y varios sensores (también de tecnología inalámbrica) que permiten conectarse o moverse sin cablear ni romper nada. No es necesario empezar una obra de cero. Además, los sistemas son escalables, es decir que podemos empezar con una instalación pequeña y luego ir agregando dispositivos dentro de las posibilidades o de las necesidades de la vivienda.
-¿Cuál es cerebro, el centro de control de toda la automatización?
El sistema trabaja con un controlador central que puede ser accedido desde cualquier computadora por medio de un explorador web y con aplicaciones que se pueden instalar en cualquier smartphone del mercado. Es una aplicación compatible con Android o IOS y juntamente es lo que te permite que puedas ingresar desde cualquier lugar del mundo.
-¿Es seguro? ¿Pueden hackearme y acceder al control de mi casa?
No, es un sistema muy seguro que posee un protocolo encriptado y eso impide que cualquier persona pueda acceder. Trabaja en una frecuencia del espectro radioeléctrico que está especialmente asignado a este protocolo para que pueda operar; por lo tanto, no interfiere con otros artefactos que puedas tener en tu casa. En cuanto es funcionalidad para la seguridad y control de intrusiones, el sistema cuenta con sensores de apertura de puertas, sensores de movimiento, detectores de humo y gases. Es decir, se les puede dar los usos que hoy conocemos de una alarma convencional y muchísimo más.
-En cuanto al costo. ¿Hoy es lujo de unos pocos o resulta accesible?
Te aseguro que si tenés en cuanto lo que son hoy en día los costos de la construcción, la domótica es algo accesible y que amortizás rápidamente en el uso de la casa.
-¿Cuál es el feedback de la gente que se decide a incorporar esta tecnología?
Cuando se empieza a ver la diferencia en la factura mensual, ahí recibimos el primer impacto positivo. Luego uno se empieza a acostumbrar y se da cuenta de las posibilidades. Es como todo, cuando no lo teníamos pensábamos que no lo necesitábamos, pero luego no nos podemos imaginar la vida sin celular o sin internet
-¿Qué está pasando en el mundo con esta tecnología?
En el mundo explotó. Hace varios años que nosotros venimos siguiendo la evolución de la domótica en el exterior. En las ferias internacionales pasaron de ser un stand de 30 metros cuadrados a ser pabellones completos. Es lo que el mundo está buscando, de lo que se habla hoy en día…
-¿Cuáles son los países más desarrollados en domótica?
Obviamente, EE.UU. También en UE donde se ven muchos entusiastas de la tecnología a quienes incluso les gusta implementar domótica por sus propios medios, es muy común.
Una evolución que seguramente ira muy de la mano con el desarrollo de Internet de las cosas…
Tal cual, a eso apuntamos. Buscamos que hoy en día se pueda controlar todo de esa manera. Que si salís del trabajo, de acuerdo al GPS de tu auto, la casa sepa cuándo activar la calefacción. Todo puede estar conectado. Se busca una automatización que eleve la sustentabilidad, la practicidad, la seguridad y la calidad de vida. La idea es poder estar tranquilo porque la casa va a reaccionar del modo en que uno lo haría.
-¿Cómo van a ser las casas en el futuro, dentro de 20 o 30 años?
Ya tenemos algunas ideas, hay modelos en prueba. Por ejemplo, las casas van a consumir energía eléctrica sólo cuando se acabe la energía que van a poder generar por sus propios medios. Lo van a hacer de un modo automático, con energía solar. Van a calefaccionar la pileta durante el día y por la noche se va a cubrir con sistemas térmicos para que esa energía se conserve. En seguridad, por ejemplo, se realizará un monitoreo perimetral por medio de drones y habrá muchas nuevas tecnologías que hoy ya están, como el reconocimientos facial, pero de un modo más masivo y aplicado a la posibilidad de tener acceso a la vivienda; por ejemplo, el portón se va a abrir reconociendo las facciones del propietario
-¿Vamos a seguir yendo al supermercado?
Yo creo que sí, porque nos gusta elegir las cosas, ver, palpar, sobre todo los alimentos. Sin embargo, sí, se apunta a las cosas interconectadas, que nos informen cuando el stock de un producto disminuya para poder planificar las compras.
En un mundo sobrepoblado, el cuidado de los recursos energéticos, la necesidad de cuidar el planeta, los requerimiento de seguridad y la búsqueda de un máximo confort son temas de preocupación diaria en nuestros hogares. Hoy, la tecnología nos permite brindar una respuesta a estos interrogantes de la mano de la domótica, permitiendo centralizar, automatizar y optimizar el funcionamiento integral de las viviendas.
En una entrevista que realizó el portal de noticias Infobae.com al jefe de operaciones de Life2Better, empresa especializada en desarrollos tecnologicos, Sebastián Aued, hablo sobre esta tendencia.
-¿Qué es la domótica?
Es la tecnología puesta en función del control y de la automatización inteligente de una vivienda. Con ella se puede reducir el consumo energético, maximizar la seguridad y elevar el confort. Todo controlado desde el lugar del mundo en el que uno de encuentre.
-En un corto plazo, todo va a ser inteligente: las ciudades, las casas, los objetos. ¿Cuál es la transformación que veremos en nuestro día a día?
La domótica es una realidad, es parte del día a día. Apuntamos a que, en el corto plazo, el común de la gente disfrute de sus beneficios. Una casa domótica tiene la posibilidad de ajustarse al entorno y tomar las decisiones como podría hacerlo uno mismo. Apuntamos a que en unos cinco años, esta tecnología tenga una explotación parecida a lo que fue la del smartphone; que deje de ser exclusiva y que sea parte de la vida cotidiana.
-¿Podrías mencionar ejemplos concretos de aplicación de la domótica?
Se puede automatizar el encendido de luces para que se apaguen automáticamente cuando no detecta movimiento en una habitación y se puede configurar para que las luces se encienden solamente si la iluminación ambiente lo requiere. También se puede disminuir el consumo de luz bajando la intensidad y las personas no se darían cuenta. A su vez, todo lo que es calefacción centralizada puede ser controlada con el sistema, se pueden manejar los equipos de aire –ya sean centrales o tipo Split–. Hay un montón de configuraciones que se pueden establecer vinculadas al uso energético. No se necesita tener un tipo de luz especial, porque es compatible con todas las luces halógenas, las luces led, tiras de led RGB, etc. Es un gran ventaja comparada con otros dispositivos porque el sistema se auto adapta al tipo de luz que tiene conectada. También las cortinas se pueden automatizar para que se levanten por la mañana o que, si hay mucho sol, se bajen solas.
-¿Tenemos que construir nuestra casa desde cero para poder hacerla inteligente?
No, en absoluto. Claro que es más fácil y que hay cosas que son complicadas de incorporar si la casa ya está edificada. Sin embargo, hay un montón de soluciones que se pueden agregar a una casa ya construida. Existe tecnología inalámbrica que se compone de un controlador central y varios módulos muy pequeños -que se pueden conectar detrás de los tomas eléctricos o detrás de los artefactos -y varios sensores (también de tecnología inalámbrica) que permiten conectarse o moverse sin cablear ni romper nada. No es necesario empezar una obra de cero. Además, los sistemas son escalables, es decir que podemos empezar con una instalación pequeña y luego ir agregando dispositivos dentro de las posibilidades o de las necesidades de la vivienda.
-¿Cuál es cerebro, el centro de control de toda la automatización?
El sistema trabaja con un controlador central que puede ser accedido desde cualquier computadora por medio de un explorador web y con aplicaciones que se pueden instalar en cualquier smartphone del mercado. Es una aplicación compatible con Android o IOS y juntamente es lo que te permite que puedas ingresar desde cualquier lugar del mundo.
-¿Es seguro? ¿Pueden hackearme y acceder al control de mi casa?
No, es un sistema muy seguro que posee un protocolo encriptado y eso impide que cualquier persona pueda acceder. Trabaja en una frecuencia del espectro radioeléctrico que está especialmente asignado a este protocolo para que pueda operar; por lo tanto, no interfiere con otros artefactos que puedas tener en tu casa. En cuanto es funcionalidad para la seguridad y control de intrusiones, el sistema cuenta con sensores de apertura de puertas, sensores de movimiento, detectores de humo y gases. Es decir, se les puede dar los usos que hoy conocemos de una alarma convencional y muchísimo más.
-En cuanto al costo. ¿Hoy es lujo de unos pocos o resulta accesible?
Te aseguro que si tenés en cuanto lo que son hoy en día los costos de la construcción, la domótica es algo accesible y que amortizás rápidamente en el uso de la casa.
-¿Cuál es el feedback de la gente que se decide a incorporar esta tecnología?
Cuando se empieza a ver la diferencia en la factura mensual, ahí recibimos el primer impacto positivo. Luego uno se empieza a acostumbrar y se da cuenta de las posibilidades. Es como todo, cuando no lo teníamos pensábamos que no lo necesitábamos, pero luego no nos podemos imaginar la vida sin celular o sin internet
-¿Qué está pasando en el mundo con esta tecnología?
En el mundo explotó. Hace varios años que nosotros venimos siguiendo la evolución de la domótica en el exterior. En las ferias internacionales pasaron de ser un stand de 30 metros cuadrados a ser pabellones completos. Es lo que el mundo está buscando, de lo que se habla hoy en día…
-¿Cuáles son los países más desarrollados en domótica?
Obviamente, EE.UU. También en UE donde se ven muchos entusiastas de la tecnología a quienes incluso les gusta implementar domótica por sus propios medios, es muy común.
Una evolución que seguramente ira muy de la mano con el desarrollo de Internet de las cosas…
Tal cual, a eso apuntamos. Buscamos que hoy en día se pueda controlar todo de esa manera. Que si salís del trabajo, de acuerdo al GPS de tu auto, la casa sepa cuándo activar la calefacción. Todo puede estar conectado. Se busca una automatización que eleve la sustentabilidad, la practicidad, la seguridad y la calidad de vida. La idea es poder estar tranquilo porque la casa va a reaccionar del modo en que uno lo haría.
-¿Cómo van a ser las casas en el futuro, dentro de 20 o 30 años?
Ya tenemos algunas ideas, hay modelos en prueba. Por ejemplo, las casas van a consumir energía eléctrica sólo cuando se acabe la energía que van a poder generar por sus propios medios. Lo van a hacer de un modo automático, con energía solar. Van a calefaccionar la pileta durante el día y por la noche se va a cubrir con sistemas térmicos para que esa energía se conserve. En seguridad, por ejemplo, se realizará un monitoreo perimetral por medio de drones y habrá muchas nuevas tecnologías que hoy ya están, como el reconocimientos facial, pero de un modo más masivo y aplicado a la posibilidad de tener acceso a la vivienda; por ejemplo, el portón se va a abrir reconociendo las facciones del propietario
-¿Vamos a seguir yendo al supermercado?
Yo creo que sí, porque nos gusta elegir las cosas, ver, palpar, sobre todo los alimentos. Sin embargo, sí, se apunta a las cosas interconectadas, que nos informen cuando el stock de un producto disminuya para poder planificar las compras.