BUENOS AIRES.- El Gobierno de Mauricio Macri anunció la intención de debatir sobre la conveniencia de bajar la edad de imputabilidad. Germán Garavano, ministro de Justicia y de Derechos Humanos, informó que el Poder Ejecutivo Nacional es consciente de que una fracción de los chicos de 15 años comete delitos, y que resulta necesaria una reforma legal que aborde el régimen penal juvenil porque la normativa vigente es paternalista y proviene de la dictadura. Garavano advirtió ayer que esa modificación debe ser abordada con base en consensos con Unicef (Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia) y con todo el arco político, y discutida en el Congreso de la Nación después de las elecciones de octubre de 2017.

“La idea es comenzar una discusión seria durante este año, pero que el tratamiento legislativo ocurra en 2018”, dijo el titular de la cartera de Justicia en diálogo con radio Nacional. Respecto de la intención de bajar la imputabilidad, el ministro reconoció que Unicef no coincide con la necesidad de tomar esa medida y señaló que respetaba esa opinión, que también estará sobre la mesa de discusión de la futura ley (se informa por aparte). Garavano expresó que su equipo ya está trabajando con Unicef, así como con jueces y expertos, respecto del abordaje de un nuevo régimen penal juvenil. El ministro manifestó que, si bien cuando se habla de los delitos que cometen los chicos el foco está en la edad, existe un problema de “reinserción escolar y laboral”, que es necesario abordar.

“El salto mayor en el delito se da en la franja de los 15 años, más que en la de los 14. Esto también tiene que ver con el consumo de drogas”, opinó Garavano.

La imputabilidad es la capacidad de comprender las consecuencias de los actos y, por ende, presupone que la persona actúa con discernimiento, intención y libertad. Sólo puede recibir una sanción penal quien es imputable. La legislación penal actual considera punibles a los chicos de entre 16 y 18 años, pero estos recién son imputables cuando alcanzan la mayoría de edad. Desde 2013, la ley electoral nacional otorga a los ciudadanos de 16 la posibilidad de sufragar: esa facultad deviene obligatoria a partir de los 18 años.

Palabra de californiano

No hubo precisiones sobre si el comienzo de la imputabilidad debía situarse en los 14 o en los 15 años. Garavano dio a entender que ese punto es parte de la discusión pendiente.

El ministro nacional expresó que la responsabilidad del Estado es dar respuestas tempranas ya que el ingreso al delito de un joven se da en forma lenta: “no es que el joven ingresa y mata a alguien, sino que se va dando un proceso de degradación y, al mismo tiempo, de abandono por parte de la familia, el Estado y la sociedad”.

Garavano planteó que el Estado debe tener un rol activo para que los chicos no entren en el círculo vicioso y manifestó que los jóvenes que cometen delitos, además de victimarios, son víctimas. “Es necesario que el Estado ponga la mayor cantidad de recursos en las etapas iniciales, es decir en la prevención, y recordó que cuando trabajó en juzgados de Menores recibió la visita de un juez de California, Estados Unidos, al que le llamó la atención que estos juzgados de menores estén siempre en el sótano o en la terraza de los Tribunales. Según dijo Garavano, esta ubicación también da cuenta de que la atención de los jóvenes que cometen delitos no es una prioridad. (Télam-Especial)