La Policía y la Justicia se encuentran analizando las cámaras que el 911 tiene en la zona de Catamarca al 800 para poder desentrañar quién es el hombre que baleó a un joven radical en la puerta de la UCR. El objetivo es examinar cuadro por cuadro para poder conocer la patente del vehículo en el que huyó, y a partir de esa información saber quien es el propietario.

El hecho ocurrió el domingo a la madrugada, cuando un grupo de jóvenes del partido festejaba un cumpleaños en la vieja casona. Uno de ellos habría tenido una discusión con un hombre que habría estado maltratando a una chica. Según los relatos, el agresor buscó un arma en su auto y le disparó en la pierna a Pablo Leal (21).

“El chico está bien y ya hay abogados trabajando en esto. Al parecer, la discusión se dio cuando una chica fue a tomar un taxi y un hombre comenzó a tratarla mal. Esto podría haber ocurrido en cualquier casa particular, no fue algo en contra del partido. De hecho, este hombre ni siquiera estaba en la fiesta”, dijo el presidente de la UCR, Julio Herrera.

Sin embargo, en la investigación se baraja la posibilidad de que el agresor sí hubiese estado en el festejo, ya que sería un conocido de una de las tres personas que festejaban sus cumpleaños. Por otro lado, se explicó que las declaraciones fueron coincidentes: dijeron que el hombre es “robusto, de baja estatura, con barba, pelo negro corto, medio pelado y de unos 27 a 30 años”.

VISTO Y OÍDO

Encuentran en “La Bombilla” a un prófugo, acusado de homicidio

Un equipo policial que patrullaba por el barrio Juan XXIII vio a un prófugo sentado en una moto. El evadido se bajó e intentó entrar a una casa pero fue reducido. Se trata de José María Romero, quien tenía una orden de detención por el homicidio de Jorge Luis Suárez, ocurrido durante un tiroteo. Fue atrapado por efectivos de la división Sustracción de Automotores, a cargo del comisario Cándido Galván.

Denunció que un hombre con acento italiano quiso abusar de ella

Un joven delgado, de tez blanca y acento italiano fue acusado de abuso por una joven de 26 años. Ella se encontraba en Yerba Buena, cuidando a su sobrina, cuando el desconocido ingresó a su habitación y se acostó a su lado. Luego intentó manosearla, pero la joven se lo impidió y logró correrlo de la casa. No quedaron huellas ni elementos que permitieran que se lo identificara.