Pese a que el jefe de Gabinete, Marcos Peña, anunció que el Ejecutivo Nacional no convocará a sesiones extraordinarias en febrero, el oficialismo y la oposición peronista deberán sentarse a discutir en febrero la distribución de los espacios en las 25 comisiones del Senado de la Nación. Cambiemos pretende llevarse la Presidencia de las más trascendentes.
La discusión promete generar algunas rispideces entre el oficialista interbloque Cambiemos, de 24 senadores, y el Interbloque Argentina Federal, de 25 peronistas “no kirchnerista”.
La confrontación se revelará cuando deba integrarse la Comisión Bicameral de Trámite Legislativo, encargada de estudiar la validez de los Decretos de Necesidad y Urgencia, y cuya tarea parlamentaria no se frena durante el receso.
El DNU sobre desburocratización del Estado, firmado por el presidente Mauricio Macri, la semana pasada será el primer tema a debatir en el año.
El interbloque oficialista en la Cámara Baja ya logró, mediante cálculos en los que se utilizó hasta el sistema D’Hont, colocar a cinco de los ocho diputados que la conforman.
En el Senado, en tanto, aseguraron que la intención es ocupar, como mínimo, tres lugares entre los cuales está la presidencia de la Bicameral para que permanezca en manos del formoseño Luis Naidenoff.
De ese modo, al peronismo no kirchnerista le quedarían otros tres o cuatro espacios y los otros dos se distribuirían entre el Frente para la Victoria (ocho integrantes) y el interbloque federal (siete miembros).
Además que quedarse con la presidencia de Presupuesto y Hacienda, en manos de Esteban Bullrich, Cambiemos también pretende dirigir desde marzo la estratégica comisión de Asuntos Constitucionales, encargada de dictaminar sobre el pedido de desafuero que pesa contra la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, a quien la Justicia acusa de presunto encubrimiento de los iraníes que planearon el atentado a la AMIA.
Asuntos Constitucionales (encabezada hasta diciembre por el kirchnerista Marcelo Fuentes) también será clave si la Casa Rosada avanza con la discusión de la Reforma Electoral.
Cambiemos también quiere manejar las comisiones de Infaestructura, Vivienda y Transporte; Economía Nacional e Inversión; y Seguridad Interior y Narcotráfico. A la vez, busca seguir al frente de Salud y Deporte, y de Relaciones Exteriores.
La Comisión de Acuerdos (es la encargada de estudiar los pliegos de funcionarios judiciales, cargos en el cuerpo diplomático y ascensos militares) seguirá siendo presidida por el justicialismo y es probable que el salteño Rodolfo Urtubey continúe siendo su presidente.
Lo mismo ocurrirá con Trabajo y Previsión Social que, habitualmente, queda para el principal partido de la oposición.
Otras comisiones clave como Justicia y Asuntos Penales; Legislación General; Minería, Energía y Combustibles; Educación y Cultura; y Coparticipación Federal de Impuestos, serán también parte de la discusión y podrían ser “moneda de cambio” en las deliberaciones internas del mes que viene (Télam).