HOY
• A las 21.30, en el teatro Alberdi (Jujuy y Crisóstomo Álvarez).
Su voz es inconfundible. Pero no sólo de cantar -como si no le costara nada- va Marcela Morelo. Como música formada en conservatorio, ella compone; en los shows toca su querido charango y baila como manda el ritmo. Está cumpliendo 20 años en el métier de la música: para celebrar hay un nuevo disco y un show que desembarca en el Alberdi.
Cómo hizo para elegir “Los 20 de Morelo” con tantas canciones -hit a cuestas es la primera pregunta. “Fue difícil, las queremos a todas. Son las que me hicieron conectarme con el público, las que ellos tomaron como propias. Nosotros interpretamos eso y elegimos este repertorio. Incluso nos renovamos; hicimos una canción nueva para celebrar 20 años, que grabé con Carlos Rivera”, explica.
A esa primera primicia hilvana otra. “Manu Sija (multiinstrumentista simoqueño) viene como músico invitado especial para esta gira. Estamos muy contentos de compartir escenario con semejante artista; ya lo hicimos varias veces. Es un capo”, sentencia.
- Entre muchos hits, Carlos Rivera es la voz de “Recuérdame” (tema de la película “Coco”), y hace furor en México, España y Argentina. ¿Cómo llegó ese contacto?
- En realidad presentamos la nueva canción -“No voy a cambiarte”- para este disco, y las autoridades de Sony me sugirieron un dúo. A Carlos Rivera le había encantado la canción. Estando en gira él grabó su parte y quedó pintada: no tocamos ni un acorde, nada. La cantó en el tono en que se la mandaron. En febrero, cuando él vino a tocar al Luna Park, la cantamos juntos por primera vez en vivo.
- Hacés fusiones muy armónicas en tus dúos. ¿Ejemplos? Con Abel Pintos, con Nahuel Pennisi...
- Disfruto de toda la música en general; canto un poco de todo. No sé qué hay, pero se arma una masa muy nutritiva, y es muy lindo artísticamente poder colaborar con otro artista, e invitarlos al escenario. Empieza a sonar la música y fluye.
- Uno de tus dúos recordados es el que hiciste con Mercedes Sosa para “Cantora 2”.
- Por favor, nuestra señora cantante argentina. Enorme Mercedes. Fue muy generosa conmigo porque yo no estaba en los planes del disco. En un té en su casa me empezó a contar que estaba grabando un disco de duetos y que le costaba muchísimo coordinar agendas con los artistas. “Si se te cae un artista, teneme en cuenta”, le dije. “Me encanta la idea, mandame una canción”, resolvió. Le mandamos “Jamás te olvidaré” y otra. Ella eligió “Jamás...” porque me contó que le hacía recordar su época de exilio. Tuvimos pocos encuentros, pero pegamos una onda bárbara. Tengo el recuerdo de maestra como cantante, como artista admirada por mí, y la vida me hizo semejante regalo. Considero que para cualquier autor la voz de Mercedes es un antes y un después; para mí lo fue. Su voz engalana y eleva cualquier canción, cualquier verso. Soy una privilegiada en ese aspecto.
- ¿Hay un público frío fuera de Argentina?
- La verdad es que siento que la música une más allá de todo. Incluso en Argentina, por regiones, por ejemplo chacarera y mucho folclore en el NOA; el sur tiene otro tipo; cada región marca diferencias con su música. Nosotros hacemos nuestra música y siempre logramos conectar. Así que en otros lugares lejanos donde tocamos el punto de conexión lo dan las canciones. Siento las diferencias de lugares, por supuesto, y emocionalmente es muy fuerte salir a tocar en otro país, pero siempre tenemos buena respuesta. No puedo decir que el público de afuera sea frío. En el show, todo el mundo termina bailando y cantando.
- ¿Qué te falta hacer en la música?
- A mí y a mi marido nos gusta estar aggiornados, informados, y buscar un sonido diferente. No sé si me saldrá un reguetón; no reniego; me gusta toda la música; alguna me gusta más que otra. No sé lo que se viene. Me gusta mucho la cumbia...
- Hablás siempre en plural, de tus músicos...
- Es porque trabajamos codo a codo con mi marido, Rodolfo Lugo. Soy la que da la cara, pero él es mi otra mitad; tiene mucha injerencia en el sonido, en la producción, en los consejos, en las propuestas. En la banda hay músicos que están desde el principio. Esta vez vamos a hacer algo diferente, no vamos con la banda completa. De hecho está Manu, que es una cosa de locos, que va a tocar todo lo que se imagine. Después está mi marido, y Pedro Pasquale en guitarra, ukelele, acústica y eléctrica; Luis Lencina en percusión bien completa, y yo con mi charango. Además todos hacen coros.
- Tu banda familiar se amplió últimamente...
- Realmente cambió nuestra vida: pasamos a ser una familia numerosa. Desde hace un año estamos con los chicos (con su esposo adoptaron tres hermanitos). Son tres soles, tres amores, son hermosos. Estamos muy felices de esta oportunidad que nos da la vida.
- Ahora, ¿tenés más o menos energía?
- Tengo energía extra, muchas ganas de trabajar; estamos haciendo canciones nuevas y tengo ganas de hacer de todo. Con los chicos, a full, acompañándolos en el colegio. Estamos enamorados de nuestros hijos. Les gusta la música, van a algunos shows y pintan para artistas.