Para algunos lo más importante es el partido del próximo jueves, cuando Atlético visite a Libertad en el cierre de la fase de grupos de la Copa Libertadores. Para otros, en cambio, el de mañana contra Lanús, por la Superliga, es vital. Ese compromiso, además de ser el cierre de la temporada en el plano local, puede significar el adiós de varios futbolistas.
Los dirigentes todavían no se sentaron a conversar con varios integrantes del plantel sobre la renovación de sus respectivos préstamos. Por esa razón el partido de mañana es tomada como si fuese la final de la Copa del Mundo para los relegados.
Salvo Alejandro Sánchez, Jonathan Cabral, Jonás Romero y David Barbona, y hasta por ahí nomás Andrés Lamas y Francisco Grahl, el resto de los futbolistas que estarán ante Lanús están más afuera que adentro de lo que viene para Atlético después del Mundial. En esa lista se puede incluir a David Valdez, Nahuel Zárate, Gonzalo Freitas, Hernán Hechalar e Ismael Blanco. Hacer un buen papel ante Lanús puede ser una bocanada de aire fresco para estos jugadores que están obligados a brillar por dos razones: porque el equipo necesita los puntos y porque para ellos es a todo o nada desde lo personal.
La decisión del cuerpo técnico de “guardar” a los habituales titulares para la Copa viene por una cuestión de necesidad. “Nos jugamos la vida en ese partido”, reconocieron en el vestuario sobre el duelo con Libertad. Pero también es verdad que ninguno ha sido descartado ni dado de baja antes de tiempo. “Todos merecen una oportunidad, y la mejor manera de ganársela es demostrando que pueden estar a la altura”, dijeron en la comisión directiva.
Grahl, por caso, supo ganarse una mejoría de su contrato el semestre pasado luego de erigirse en una de las figuras en la semifinal de la Copa Argentina contra Rosario Central. Ahora vuelve a ser titular y tratará de ratificar que es un buen recambio y que puede ser opción para integrar el 11 ideal del “Ruso” a futuro.
Otro hecho importante es el regreso de Romero al plantel superior. No juega desde aquel triunfo en Mendoza ante Independiente, por la Copa Argentina. A los 17 años es uno de los grandes proyectos del club. Para él, sí habrá futuro. Para otros, quizás ya sea demasiado tarde.