Momentos antes de que Samir Domínguez fuera asesinado de un disparo en la espalda, en barrio 11 de Marzo, una mujer de Villa Amalia lo había denunciado. Esta persona contó que dos jóvenes en motocicleta se detuvieron frente a su casa e hicieron casi 10 disparos: los testigos le aseguraron que uno de ellos era Domínguez.
El ataque al que hace mención la denunciante quedó filmado por las cámaras de seguridad de la casa, ubicada en calle Granaderos de San Martín al 1.100.
Un lector mandó videos a LA GACETA WhatsApp: en uno se observa que tres niños juegan en una cama elástica, aparentemente ubicada en el garaje de la casa, de repente escuchan disparos, se tapan los oídos con las manos y salen corriendo, asustados.
Asesinan a un chico de 16 años en Villa Amalia: es el noveno homicidio en siete días en TucumánMientras que en el segundo video puede verse directamente el ataque. En esta oportunidad, la cámara está ubicada en la puerta de la casa y se ve a dos jóvenes en una motocicleta que detienen la marcha durante pocos segundos, cada uno levanta un arma y abren fuego.
La denuncia
Según denunció la dueña de casa en la seccional 9°, ese ataque se produjo ayer a las 19. "Me encontraba en mi casa, más precisamente en la cocina, y en ese momento siento varios estruendos, como ocho aproximadamente. Al mirar las cámaras de mi casa, observo a dos sujetos que se movilizaban en una moto de baja cilindrada, sin cachas; el acompañante que usaba una remera celeste hacía disparos hacia mi casa", relató la mujer en la comisaría.
"Al salir observo que en la pared del frente de mi casa había dos impactos de bala, pero puede haber más. Quiero hacer constar que mis hijos se encontraban en el garaje, jugando, y gracias a Dios no les pasó nada, como así también quiero dejar aclarado que desconozco por qué me hicieron esto", aseguró.
Por último, la mujer dijo que habló con un grupo de jóvenes que presenciaron la balacera y estos le aseguraron que el autor de los tiros era Samir Domínguez. "No conozco a esta persona", afirmó la denunciante.
¿Venganza?
Pasaron casi dos horas hasta que Samir, de 16 años, resultó asesinado. El adolescente se encontraba en la puerta de su casa, situada en el pasaje Magallanes al 1.300, cuando recibió un disparo en la espalda. Lo llevaron de urgencia al hospital Padilla, pero falleció pocas horas después.
Los investigadores sospechan que pudo haberse tratado de una venganza por el ataque que el joven habría cometido momentos antes. Sin embargo, no están del todo claro los motivos del enfrentamiento ni quién habría acabado con la vida de Samir.