Santiago Griffo fue el protagonista de la noche del Bailando 2018. El hijo de Gladys "La Bomba Tucumana" Jiménez no se destacó por su faceta artística. Fue tendencia en las redes sociales por el apasionado beso que le dio a Sol Pérez, la chica del momento.
Todo comenzó cuando Marcelo Tinelli le recordó a los padres de "La chica del tiempo" que su hija habría tenido un vínculo amoroso con el "Tyago". "Son amigos, son amigos", le dijo el padre. Pero el conductor insistió: "¿Pero sabían ustedes dos como padres que salió con su hija?".
"No salimos, somos amigos, hay una relación de buena onda", confesó el cantante tucumano. Sin embargo, Tinelli lo puso contra las cuerdas y terminó reconociendo que algo habían tenido durante el último verano. "Sí, un poquito", detalló.
La rubia coincidió con Griffo y aceptó que hubo algo hace unos meses: "está todo bien, pero tiene que remar mucho. Fue un toco y me voy, él puede estar con quien quiera".
Ni lerdo ni perezoso, Tinelli reaccionó rápidamente y le preguntó al artista: "Como que la querés conquistar pero bien". Fue entonces cuando "Tyago" se acercó y entonó la letra de "Vuélveme a querer", de Cristian Castro, y el conductor les pidió un beso.
Cuando quizás muchos podían pensar que la rubia y Santiago iban a evitar el contacto, se fundieron en un apasionado beso que revolucionó el estudio.