La tormenta de ayer afectó a gran parte de la provincia, sobre todo al interior, en donde se registraron casas destruidas, techos volados, árboles caídos y servicios en baja, entre otros incidentes.
"El barrio más afectado fue San Francisco, en Famaillá. Si bien no nos informaron que se haya abierto el centro de evacuados, hubo 20 familias anegadas que ya fueron asistidas y la ayuda continúa hoy", informó Fernando Torres, director de Defensa Civil de la provincia.
El funcionario aseguró que el lugar que más problemas sufrió fue la zona que une Famaillá y Monteros: "cayó muchísima agua. En Bella Vista también".
Vecinos de esos departamentos enviaron fotos de cómo quedaron sus barrios. En el caso de los famaillenses, las imágenes impactaron.
Sobre las fotos de la casa destruida al costado de la ruta, Torres explicó: "algo se huracanó en ese lugar. Fue muy intenso".
Por otro lado, agregó que la zona de Caspinchango es la que más lluvia acumuló: hasta las 6.30 había unos 160 milímetros.
En tanto en capital y Yerba Buena se registraron árboles y ramas caídas y el servicio eléctrico afectado. Se acumularon unos 60 milímetros de agua en total, teniendo en cuenta la tormenta de ayer por la tarde y la lluvia de la madrugada.
"Se está trabajando para restablecer los servicios en donde se cortó", finalizó.
Más lectores enviaron fotos de las consecuencias del temporal. Uno de ellos registró la caída de un cartel en pleno centro: la esquina de las calles Santiago y 25 de Mayo.
Otro, una complicada situación que se vivió en Aguilares. Durante una misa, ayer a las 20, una carpa que cubría a los fieles cayó y dejó algunos heridos.
"Una señora, con la cabeza ensangrentada, fue llevada al hospital. Muchas mujeres asustadas debieron ser asistidas por los nervios", expresó Rubén Fernando Olmedo, un testigo.
El accidente ocurrió en la calle Vélez Sarfield al 1.500, donde está ubicada la gruta de la Virgen de Lourdes.