Mientras que el legislador Ricardo Bussi, líder del partido Fuerza Republicana, ha presentado un proyecto de ley para reducir gastos en la Legislatura (eliminando incluso los gastos de telefonía), los concejales del mismo espacio en Tafí Viejo han presentado un pedido en el sentido contrario: quieren una oficina nueva, computadoras, impresoras y teléfonos celulares con líneas pagas, entre otras cosas.
Bussi anunció hoy que su bloque presentó un proyecto de ley que promueve la transparencia, la austeridad y la reducción del gasto político de la Legislatura. Propuso limitar los gastos asignados al personal de los bloques políticos y obliga a que el número de empleados y el presupuesto de cada legislador deba ser publicado en el sitio web de la Legislatura.
Con ese proyecto, además, pretende que se eliminen “los gastos superfluos”, entre los que mencionan la telefonía celular, viajes, vehículos oficiales y choferes, entre otros.
Pero en Tafí Viejo la historia es otra y los concejales Luciana Stakelun y Domingo Orquera (hermano de Sandra Orquera, vicepresidenta segunda de la Legislatura y cuñado de Bussi) y presentaron ante la presidencia del Concejo Deliberante un listado con sus pedidos para poder trabajar dentro del cuerpo.
Los requisitos de los concejales fueron detallados en una misiva presentada el 6 de noviembre: una oficina dentro del Concejo Deliberante, con el mobiliario necesario para el funcionamiento de la misma; dos computadoras de escritorio con sus respectivas impresoras; dos teléfonos celulares con sus correspondientes líneas; cuatro sillas, resmas de papel, biblioteca y armario.