Los tucumanos que todavía no salieron de vacaciones -o que no lo harán- acuden a las plazas para tomar aire fresco, llevar los chicos a jugar, hacer deporte, o simplemente pasear o sentarse a tomar mate en contacto con la naturaleza.
Están los vendedores ambulantes de golosinas, una parada "casi" obligada de los papis antes de sacar los tickets de la calesita.