Los 10 rugbiers detenidos el sábado por el crimen de Fernando Báez Sosa (19), el joven que murió tras ser golpeado a la salida de un boliche en la ciudad de Villa Gesell, se negaron a declarar ante la Justicia, mientras que Pablo Ventura, el restante apresado, negó su participación en el crimen.
La fiscal Verónica Zamboni, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Villa Gesell, llamó a indagatoria a los diez jóvenes que habían sido detenidos horas después del crimen de Sosa, y los acusó del delito de “homicidio agravado por el concurso premeditado por dos o más personas”, el cual prevé como única pena la prisión perpetua.
Los 10 rugbiers fueron identificados por la Policía como Matías Benicelli (20); Ayrton Viollaz (20); Máximo Thomsen (20); Luciano Pertossi (18); Ciro Pertossi (19); Lucas Pertossi (20); Alejo Milanesi (20); Enzo Comelli (19); Juan Pedro Guarino (19) y Blas Cinalli (18).
Pablo Ventura, el joven detenido en la ciudad de Zárate, negó ante la Justicia haber estado en la ciudad de Villa Gesell y dijo que no tiene nada que ver con el homicidio, durante su declaración indagatoria que se extendió durante 45 minutos. (Télam)