Los avisos aparecen en los grupos de Facebook que congregan a tucumanos residentes en Provincia y Ciudad de Buenos Aires. "Mañana salimos hacia Córdoba, Santiago del Estero y Tucumán. Tengo lugares disponibles". "Lunes 1/6, Buenos Aires-Tucumán, gestionamos todos los permisos". "Mañana salimos a Tucumán: llamá al 116703-XXXX".

En plena cuarentena por la pandemia de coronavirus, y con las empresas de transporte de pasajeros paralizadas por las restricciones para circular, quienes ansían volver a la provincia se pueden ver tentados por contratar esos servicios. Sin embargo, desde el Gobierno provincial advirtieron que los traslados de esas características son "clandestinos" e "ilegales".

"Para los ingresos a Tucumán nos valemos de los informes del Sistema de Salud, que nos da los cupos. Y si alguien viene desde Buenos Aires, está llegando de una zona de alto riesgo (de circulación de covid-19), por lo que sí o sí debe permanecer en cuarentena controlada, y debemos contar con un lugar específico para albergarlo. Por eso, si no cuentan con la autorización específica para el ingreso y no se lo tramita por las vías correspondientes, se trata de un traslado ilegal", afirmó el subsecretario de Seguridad, Luis Ibáñez, a LA GACETA.

En el Poder Ejecutivo ya habían tomado conocimiento sobre los viajes ofertados por Facebook, al punto de que ayer se formuló una presentación en la Justicia penal por un usuario en particular. Además, se llevaron a cabo reuniones con los encargados de las fuerzas de seguridad apostadas en la frontera con Santiago del Estero para reforzar los controles. Sobre todo, porque se detectaron caminos alternativos, por los que también se podría acceder a suelo tucumano.

En automóviles, hasta la frontera

"Estamos saliendo el miércoles y el domingo. ¿Pero tiene domicilio en Tucumán? Porque si no tiene, no lo vamos a poder llevar", explicó M., vía telefónica. Ella contestó uno de los teléfonos que aparecían publicados en Facebook. Y ante una consulta particular, explicó cómo es el servicio que prestan, y por el que cobran $8.000.

Los traslados se hacen en tres automóviles que, según dijo, tienen permisos para circular por las rutas nacionales. Vienen en caravana, acompañados por una camioneta, en la que llevan todos los equipajes. "Al permiso lo gestionamos nosotros. Sin eso no llevamos a nadie a ningún lado, porque es un trastorno para todos", advirtió la mujer.

Se refería a la autorización para ingresar a la provincia. Si bien admitió que un compañero de ella era quien se especializaba en el tema, relató que, a grandes rasgos, había dos opciones: el de "regreso a casa", al que calificó como "el más complicado"; y el de "asistencia a una persona mayor", que consta de una declaración jurada y "sale mucho más rápido". 

"Al trámite lo hacemos nosotros. Pero usted puede entrar a la página del Gobierno (nacional), poner el número de DNI y le va a saltar (el papel que) nosotros imprimimos. Si lo pierde, ahí lo tiene. También lo puede bajar de la aplicación del celular Cuidar, que está en el PlayStore", señaló. 

Una vez completado ese proceso, el cliente queda en condiciones de formar parte del próximo traslado.

El automóvil pasa a buscar al residente tucumano por Buenos Aires, en el lugar pautado. Como el destino del viaje es esta provincia, sin permanencia en otras jurisdicciones, no hay inconvenientes para realizar el trayecto, explicó M.

Eso sí, los "remises" no ingresan a Tucumán. "El pasajero se tiene que bajar en el 'arco'", señaló, en alusión al sitio ubicado cerca del puesto fronterizo con Santiago del Estero. Agregó que, ya en esta provincia, al cliente lo esperará un taxi, que está incluido en la tarifa de $8.000 y que ha sido acordado de antemano, como parte del servicio que brindan desde Buenos Aires. "Ese taxi lo lleva a la Terminal de Ómnibus de Tucumán, donde le van a tomar la fiebre y le van a pedir los datos para ver en qué lugar va a hacer la cuarentena", señaló. Aclaró que no reciben depósitos ni trasferencias bancarias. Sólo efectivo, antes de subir al automóvil que emprenderá el viaje. "Es todo por palabra. Cuando tenemos la gente (para completar el cupo), lo llamamos y acordamos para buscarlo", remarcó.

Por las redes

En la Casa de Gobierno ya habían tomado nota de los servicios de traslado Buenos Aires-Tucumán (y viceversa) que ofrecía por Facebook el usuario C.L. "$6.000, recibimos tarjetas y gestionamos permisos", señalaba su aviso.

Además, respondía consultas a través de los comentarios. "Se puede pagar con tarjeta o link de pago. O cualquier pariente (tuyo lo puede hacer) con RapiPago o PagoFácil. No pedimos seña, más que la palabra y el compromiso del que viaja", le aseguró C.L. a una mujer. Más tarde, cuando ella se lamentó por no contar con tarjetas, el chofer le ofreció una alternativa: "nos paga en efectivo, cuando estamos en el viaje". Ella aceptó: "gracias, yo lo llamo".

En este caso, el servicio también se limitaba al "arco". "Eso es pasando Las Termas (de Río Hondo), antes del peaje de la ruta 9. De ahí te puede pasar a buscar un pariente, o un taxi tuyo, o bien un taxi de los que conocemos nosotros, en el último de los casos. Los últimos viajes (que hicimos), la mitad va a cuarentena. Hay que esperar el hisopado. Tres o cinco días, máximo, en un hotel de $1.000 diarios a cargo tuyo o en centros de salud, gratis", le respondió C.L. a otra usuaria.

Las vías oficiales

En el gobierno advirtieron que los ciudadanos con residencia tucumana que se encuentren en otras jurisdicciones deben efectuar los trámites para regresar a través de los canales oficiales, a través del programa "Regreso a casa".

Las solicitudes, que son evaluadas por el Comité Operativo de Emergencia (COE) de Tucumán, están suspendidas provisoriamente por la cantidad de pedidos que están en curso, por lo que quienes no lo hayan realizado hasta el momento deberán armarse de paciencia. En ese sentido, cerca de 500 titulares de vehículos ya han gestionado el regreso a la Provincia, y su trámite continúa vigente (es decir, no debe ser reformulado). Por otro lado, estos traslados se hacen en autos particulares, pero no están permitidos los viajes en taxis ni remises.

Además, las autoridades están atentas a lo que sucede en los caminos "alternativos" de la frontera, donde se reforzaron los controles. Ese es uno de los puntos por donde temen que puedan acceder ciudadanos que hayan quedado varados en el límite con Santiago del Estero. En esos casos, no será posible hacerles una evaluación y un seguimiento de su estado de salud.