Apenas una declaración superficial, como para salir del paso. El conductor de "Panorama Tucumano", Federico van Mameren, reprochó esta actitud de las autoridades de la provincia, frente a cualquier problema -un hecho trágico o una "desobediencia"- que se presenta en la sociedad.
El periodista comenzó su editorial con un parangón entre dos asesinatos horribles, conectados por el victimario: tanto el afroamericano George Floyd como el trabajador rural Luis Espinoza murieron a manos de policías.
"La muerte de Floyd en Minnesota -espantosa, vergonzosa, indignante, lamentable, un abuso inexplicable- es exactamente la misma que la de Espinoza, que ocurrió acá nomás. Pero importan las reacciones: el mundo habla de Floyd, el país habla de Espinoza; Tucumán, no", acusó Van Mameren.
Y continuó con una explicación para este silencio. "El gobernador (Juan Manzur) sintetizó todo con que la Justicia se debe ocupar y punto", dijo el conductor.
Seguidamente, recordó que recientemente, en una entrevista que concedió a la periodista Irene Benito, en LA GACETA, el prestigioso jurista Roberto Gargarella había dicho que una democracia recién podía considerarse tal en la medida en que se dé en su marco un debate profundo. "En Tucumán, no hay debate profundo", puntualizó Van Mameren.
Mencionó, luego, que tanto el transporte como las instituciones en general, no funcionan precisamente debido a la falta de un debate profundo; debido a que la clase política, en especial, solamente se contenta con posicionarse a favor o en contra del hecho.
"Espinoza nos interpela. No se trata de que renuncie (el ministro de Seguridad, Claudio) Maley. Se trata de qué Policía queremos los ciudadanos; de qué Policía quiere Manzur; de qué Policía quiere el vicegobernador, (Osvaldo) Jaldo, o los legisladores. ¿Qué Policía quieren para nuestra sociedad?", les preguntó el periodista.
Algo similar, advirtió Van Mameren, ocurrió cuando las autoridades de la provincia dieron el visto bueno para que, en el marco de la pandemia de la covid-19, se puedan retomar algunas prácticas deportivas. "Cuando empezó la cuarentena, el miedo hizo que deleguemos a los gobernantes nuestro bien más preciado: la libertad. Y quizá no estamos conformes con cómo están administrando esa libertad. Y eso quedó claro con la vuelta de la actividad física: cada uno hizo lo que quiso. O porque ya no tememos, o porque no respetamos las órdenes, o porque estamos hartos, o porque no confiamos", dijo.
Señaló, seguidamente, que se trata de otra oportunidad para ejercer el tan necesario debate profundo: "todo estas acciones los interpelan a ustedes, como autoridad, para que revisen, profundamente, qué está pasando".