“No se trata de uno o tres puntos de retenciones, sino de la vida de nuestros seres queridos y de poder trabajar tranquilos”, dijo Roberto Palomo. El vicepresidente de la Asociación de Productores Agrícolas y Ganaderos del Norte (Apronor) justificó así la movilización de hoy de ruralistas y de pobladores de zonas rurales para exigir “soluciones” ante la ola de inseguridad.
Los manifestantes se reunirán en la zona del parque 9 de Julio, altura de la avenida Gobernador del Campo, a partir de las 9.30. Allí se iniciará la protesta como reacción directa al crimen del agricultor José Porcel, ocurrido en La Ramada de Abajo, al noreste de la provincia. Se desplazarán por avenida Sarmiento hasta los tribunales penales y la a Legislatura. Entre los dirigentes especulaban ayer sobre reuniones con representantes del Ministerio Público Fiscal (MPF) y con el titular del Poder Legislativo, Osvaldo Jaldo, aunque estas no fueron confirmadas durante la jornada.
“Queremos sentarnos con los representantes de los tres poderes para ver cómo solucionamos el problema de la inseguridad, que va creciendo día a día. Cambiando el ministro de Seguridad (por Claudio Maley) o poniendo más policías no se resolverá esta situación. Puede ser que nos equivoquemos, pero esta es nuestra mirada frente a los hechos ilícitos”, señaló Palomo.
“Buscamos modificar este sistema que no viene dando resultado: una Justicia que libera delincuentes; cárceles que no pueden cobijar más presos; y comisarías abarrotadas de detenidos, con un 30% del personal policial afectado a cuidarlos”, añadió el dirigente agropecuario.
El sábado, un día después de la muerte de Porcel, el ministro de Seguridad había convocado a una reunión a representantes de las entidades rurales (hasta ayer no estaba confirmada). “Estamos abiertos al diálogo, queremos hablar y acordar los cambios y refuerzos de seguridad que entendemos que son necesarios, además de tocar otras problemáticas implícitas de que tiene la actividad agrícola y que deben solucionarse”, había expresado el funcionario.
El caso
El viernes por la noche, al menos cuatro personas arribaron a la propiedad de la víctima, de 80 años. En el lugar, le pidieron a Porcel y al empleado una manguera porque su auto se había quedado sin combustible en la ruta. Accediendo al pedido y cuando iba buscar el material, el obrero fue reducido y atado por los delincuentes. El propietario, quien se había quedado con otro miembro de la banda en la parte de delante de la casa, sufrió golpes y recibió un disparo en el pecho.
Tras la agresión, los atacantes huyeron en un auto Volkswagen y en una moto. El vehículo volcó a unos cuatro kilómetros de la casa de la familia Porcel. Los habitantes de la zona llegaron hasta el sitio de la colisión y llamaron al 107. Un ocupante fue hospitalizado y el acompañante, atrapado por los vecinos.
“Desde el campo, el interior, vendrá mucha gente. Vendrá cansada, con miedo, pero con la intención de hacer algo para buscar un freno al nivel de inseguridad. Esperemos tener adhesión de los habitantes de la capital. Nosotros estamos poniendo la cara. No se trata de uno o tres puntos de retenciones, sino de la vida de nuestros seres queridos y de poder trabajar tranquilos, entre otras intenciones”, dijo Palomo.
Más casos
En medio de los reclamos, ayer se conocieron otros hechos de inseguridad. Tiburcio López Guzmán denunció que desconocidos forzaron el portón de entrada de su quinta, Doña Pepa, ubicada sobre la ruta 317, cerca de Gobernador Piedrabuena, rompieron la ventana y se llevaron una heladera, horno y cocina eléctrica y otros elementos del hogar.
El productor contó que este ataque se registró el sábado durante la tarde, horas después del homicidio de Porcel. “No pude ir a verificar los daños aún porque se me venció el permiso de circulación”, se lamentó. Además, señaló que hace alrededor de un año habían “vaciado” la casa: “se llevaron hasta la cama”, enfatizó.
El domingo por la noche, un jornalero del citrus fue atacado por tres personas, en momentos en que regresaba a su casa de la localidad de Baviera, en el departamento Famaillá. Volvía junto con un compañero, tras realizar una “changa” de albañilería.
El colega, quien manejaba la moto, pudo sortear el asedio del grupo de agresores. Sin embargo, Sergio del Moral, la víctima, fue interceptado y golpeado en medio del camino, a la par de la ruta 38.
“Le quitaron las herramientas a Sergio. Además, cargaba una mochila que tenía lo que había cobrado del limón. Ya se sabe quiénes lo atacaron. Dos de esos muchachos viven en el barrio Tres Marías y el tercero, en el cruce. ‘Metele con el cuchillo’, le gritaron. Lo dejaron tirado porque parecía estar muerto. Los familiares lo encontraron con la linterna. Tenía sangre en la cara; no se le veían los ojos”, describió Adolfo Herrera, un allegado al herido.
Del Moral fue llevado al hospital de Famaillá. Luego lo trasladaron hasta un clínica privada de la capital, donde permanece internado por las graves lesiones, según consignó el diario Elfamaillense.com.ar.
“Sin audiencia”
Vargas Aignasse dijo que no estaba prevista una reunión en la comisión de seguridad
“No fuimos notificados sobre una reunión (desde el Ministerio de Seguridad). Si nos invitan, podremos participar”, expresó ayer Gerónimo Vargas Aignasse, presidente de la Comisión de Seguridad de la Legislatura. El parlamentario indicó que tampoco está previsto un encuentro con los productores, teniendo en cuenta la movilización que realizarán hoy los ruralistas de la Asociación de Productores Agrícolas y Ganaderos del Norte (Apronor). “No hemos recibido un pedido de audiencia”, enfatizó. El campo reclamó dialogar con los representantes de los tres poderes, ante la ola de inseguridad.