LAS DUDAS DEL CASO ARAMBURU
Los aspectos más importantes de la pesquisa destinada a esclarecer totalmente el secuestro y la muerte del teniente general Pedro E. Aramburu permanecían ignorados. Esto se debe a que se mantiene el secreto de sumario y porque en la reunión informativa de hace dos días en el Departamento de Policía, los periodistas no pudieron hacer preguntas ni plantear interrogantes. Por tal motivo subsisten las dudas entre las cuales figura: ¿existe entre los detectives por lo menos una hipótesis acerca de quiénes son los instigadores del secuestro y crimen? Las autoridades tampoco suministraron una definición precisa acerca de la ideología a la que pertenece el grupo que secuestró y asesinó al ex presidente de facto. Se hicieron algunas referencias aisladas sobre determinados elementos de la banda de raptores, que van desde ser identificados como “castro-comunistas” adiestrados en Cuba, hasta ubicarlos en el movimiento “Cristianismo y Revolución”, de inspiración católica.
FUERTE MISIVA DE ONGANÍA A LEVINGSTON
El ex presidente de facto Juan Carlos Onganía rechazó categóricamente declaraciones de diversas fuentes que lo habían señalado como instigador del secuestro y asesinato del ex presidente de facto teniente general Pedro E. Aramburu.
En una extensa carta que le envió al presidente de facto Roberto Marcelo Levingston, señala: “cuando me alejé del cargo de presidente de la Nación por un acto de fuerza que la historia habrá de juzgar, me impuse guardar silencio sobre hechos y conductas como contribución personal a la paz y al orden… Hoy debo quebrar contra mi voluntad ese silencio, porque él no puede alentar la difamación cobarde ni avalar la impunidad en que se desenvuelve. Irresponsables declaraciones pretenden atribuirme la instigación del secuestro y asesinato del teniente general Aramburu con el fin de perpetuarme en el poder… No estoy dispuesto a aceptar impasible que se destruyan honras bien ganadas, ni se ofenda a quienes sirvieron con desinterés y patriotismo”, expresó.
BOLIVIA: AMENAZAN EJECUTAR REHENES
Los guerrilleros del denominado “Ejército de Liberación Nacional” (ELN) de Bolivia, exigieron la excarcelación de 10 presos políticos a cambio de la vida de dos ciudadanos alemanes tomados como rehenes hace tres días, al atacar el grupo subversivo las instalaciones de una firma minera norteamericana en la localidad aurífera de Teoponte, a 300 kilómetros de La Paz. Las condiciones para el rescate pusieron en marcha una serie de gestiones por parte de la embajada de Alemania Occidental y de un sacerdote jesuita, para obtener la libertad de Eugen Shulhauser y Gunther Lerch. Ambos son empleados de la compañía norteamericana South American Placers, que opera en esa región desde 1956. El plazo que los guerrilleros dan para que los detenidos sean puestos en libertad y enviados a algún país extranjero ence hoy a las 10 de la noche. Esta operación fue la primera de gran magnitud realizada en Bolivia desde la muerte de Ernesto “Che” Guevara, en octubre de 1967.