No hay dudas de que este que se aproxima va a ser un verano poco común. La pandemia de coronavirus ha sacudido los tableros de toda clase y, sobre todo, los del turismo, la industria que espera con ansias enero para saber cómo vendrá la temporada. Y, entre los muchos cambios que se esperan, uno de ellos es la expectativa sobre la elección de alojamiento: con promociones y con el plan oficial PreViaje, que prevé la devolución del 50% de todos los gastos en crédito para usar en servicios turísticos, es muy probable que sean muchos más los que elijan instalarse en hoteles y menos en casas de alquiler temporal.
“Por supuesto, son dos tipos de viajes diferentes. En el hotel tenés todo listo, alguien que te hace la cama y te limpia la habitación todos los días; en una casa, en cambio, es uno el que se gestiona todo. Normalmente era más barato, pero con las facilidades de que habrá este año, es posible que mucha gente se vuelque a los establecimientos hoteleros”, analiza Sebastián Giobellina, presidente del Ente de Turismo de Tucumán.
Hay un dato más en favor de los hoteles, advierte Giobellina: la oferta de casas particulares de alquiler ha caído estrepitosamente debido a que los propietarios, ante la imposibilidad de hacer viajes, se quedarán en sus casas de veraneo. “En cambio, la oferta de hotelería va a seguir siendo la misma que en años anteriores”, señaló.
Seguridad y protocolos
Desde que comenzó a despejarse el cielo de la pandemia y se empezó a ver un futuro cercano para el turismo, los pronosticadores coincidieron en que este verano la gente buscará destinos donde se pueda disfrutar principalmente del aire libre. “Es un turismo que va a elegir la naturaleza, según marcan las encuestas, antes que las grandes ciudades, por las aglomeraciones de gente”, explicó Héctor Viñuales, presidente de la Cámara de Turismo de Tucumán y de la Federación de Cámaras de Turismo del país.
“En ese escenario, donde los turistas y los viajeros se preocuparán especialmente por los cuidados de la salud y por la higiene, creemos que los hoteles llevan ventaja respecto de las casas particulares, porque se trata de un ambiente mucho más controlado donde se respetan todos lo protocolos aprobados internacionalmente”, definió el dirigente empresario.
Además, estarán presentes las ventajas económicas: en los principales hoteles se puede pagar en varias cuotas la estadía y la mayoría, además, está inscripto en el plan nacional PreViaje. Esto implica que, de todos los gastos que se relicen en servicios turísticos asociados al programa, el viajero recuperará el 50% en forma de crédito para usar en el mismo rubro a partir de enero. Ese crédito podrá usarse, por ejemplo, para pagar comidas o excursiones, siempre y cuando las empresas estén inscriptas.”A esto se le suman los paquetes promocionales, la financiación, la comodidad y la seguridad de los hoteles. Todas las cámaras de turismo estamos de acuerdo en que los precios subirán por debajo de la inflación y que, al ser un año tan especial, vamos a ser cuidadosos en este y en todos los sentidos”, destacó Viñuales.
Según los primeros informes que le llegaron al dirigente, en los Valles hay realidades dispares respecto de las reservas, pero siempre con una tendencia positiva.
“Hay establecimientos que ya tienen un buen nivel de ocupación y otros que poco o nada. Creemos que dependerá mucho de la iniciativa personal de cada empresa para salir a ofrecer su producto en un momento de mucha competencia”, finalizó. Y en esa competencia, en ese río revuelto, el que puede salir ganando es el consumidor.
Precios estimados por habitación doble, siete noches, durante enero, con desayuno incluido
- TAFÍ DEL VALLE: A partir de $ 24.000 un hotel básico, de tres estrellas. En un hotel de más categoría y en el centro, el precio asciende a $ 32.000 la misma estancia. En hoteles boutique, más retirados, los precios pueden alcanzar hasta más de $ 50.000.
- CAFAYATE: Se consiguen hosterías a partir de $ 17.000 y hoteles de alta categoría a partir de $ 63.000 y hasta más de $ 400.000. El promedio para esa estadía ronda los $ 25.000.
- MENDOZA: Los hoteles céntricos básicos arrancan en $ 25.000, mientras que uno de una cadena internacional, cinco estrellas, se consigue a partir de $ 62.000. En la zona de Luján de Cuyo, más residencial y tranquilo, se consiguen buenos hoteles a partir de $ 27.000.
- LAS GRUTAS: a partir de $ 22.000 hoteles básicos. Un resort termal, con spa y servicios de ese tipo, cuesta $ 40.000 por esa estadía.
- MAR DEL PLATA: Los hoteles céntricos de dos o tres estrellas se cotizan a partir de los $ 25.000. Un hotel de cadena internacional, cinco estrellas, arranca en los $ 79.000
- EL CALAFATE: Hosterías desde $ 20.000 y hoteles de más categoría a partir de $ 30.000. Un establecimiento boutique alcanza los $ 40.000, mientras que un hotel de cuatro estrellas se cotiza por encima de los $ 92.000.
- BARILOCHE: Hoteles económicos de tres estrellas, céntricos, a partir de los $ 30.000. Un hotel cinco estrellas arranca en los $ 76.000.
- CÓRDOBA: Se encuentran buenos precios en hoteles céntricos de categoría, de cinco estrellas, a partir de $ 40.000 en promoción. Un hotel más orientado a jóvenes y grupos de amigos, céntrico, cuesta $ 15.000.