La idea era arrancar temprano, cuando el viento aún no sopla. El punto de encuentro fue la desembocadura del río Tafí, en la parte final del cauce. Ahí, Adriana Latorre y su pareja Fernando recibieron a los turistas y les dieron las indicaciones técnicas y de seguridad antes de subir al bote. Un día nueblado se mezclaba con el paisaje natural de la villa.
Las actividades de aventura se han convertido en una de las atracciones principales del verano de Tafí del Valle. Y el kayak, una de las experiencias elegidas por los visitantes. “Antes de entrar al agua hacemos un mini curso de técnica y seguridad. A partir de los 12 y 13 años ya se pueden meter al agua. La salida dura una hora y media aproximadamente”, contó Latorre, organizadora de la jornada.
“Hay que tener en cuenta el viento. Por eso arrancamos temprano con las actividades (a primera hora). El viento y el oleaje pueden generar miedo en aquellas personas que no tienen experiencia”, remarcó Fernando.
El rosarino
Pablo Rubino llegó desde Rosario, en Santa Fe, a la villa para pasar sus vacaciones. Esta mañana se subió al kayak para poder disfrutar desde el agua el escenario natural del principal centro turístico de la provincia. “No tenía idea cómo hacerlo, pero te enseñan muy bien. También muy lindo el lago (del dique La Angostura). Quería seguir en el bote”, confesó.
El equipo de “BUEN DÍA VERANO” también se subió a la canoa y recorrió un sector del río para vivir esta experiencia.