El gol sobre la hora que terminó sentenciando el tercer empate en fila en el arranque de la nueva temporada dejó un sabor amargo en San Martín. Los rumores sobre final de un ciclo comenzaron a sobrevolar desde el mismo instante en el que Mitre marcó su tanto; sin embargo entre los que toman decisiones en La Ciudadela nadie piensa eso.
“No pensamos nada de eso”, fue el mensaje que salió desde las entrañas de Bolívar y Pellegrini, dejando en claro que la confianza en el grupo y en el trabajo que se viene realizando sigue firme.
La mochila que hoy por hoy cargan Favio Orsi, Sergio Gómez y cada uno de los futbolistas que componen el plantel es muy pesada. El “Santo” no gana desde hace 10 juegos (seis por el mini torneo que definió los ascensos de la pasada temporada, uno por Copa Argentina y los tres del presente campeonato); y la última victoria en su estadio se remonta al 24 de febrero de 2.020 (a partir de ahí, suma siete partidos sin festejar).
Así como en la campaña que quedó trunco San Martín rompía cualquier récord que se le aparecía en su camino, la sucesión de malos resultados comienza a darle forma a una de las peores rachas de su historia.
La peor marca de juegos sin ganar de manera consecutiva es de 16 partidos; mientras que la racha más adversa jugando en casa es de ocho sin cantar victoria. Por eso, los números actuales dejan a los números actuales en el segundo lugar de los récords adversos.
“Es difícil lo que nos pasó; somos responsables”, aseguró Gómez sobre el empate sobre la hora que privó a su equipo de poder ahuyentar todos los fantasmas”. “En las tres fechas el equipo mereció algo más, pero el fútbol no es merecimientos; acá tenés que ganar”, sentenció.
Todo el esfuerzo hecho durante casi 90 minutos se vino a abajo por una irresponsabilidad luego del festejo del gol de Lucas González. “Es un error infantil perder un jugador durante un festejo. Dominamos todo el partido, pero nos quedamos sin la victoria. Tenemos que seguir mejorando”, advirtió Tino Costa.
El volante es uno de los futbolistas con más experiencia del plantel y entiende que no deben desesperarse pese a que la victoria sigue siendo esquiva. “Hay muchas cosas que se están haciendo bien; no hay que mirar sólo lo negativo. Más allá de los errores que pudimos haber cometido no estamos tan mal. En tres partidos generamos muchas situaciones y no las concretamos. Hay que seguir creciendo porque la victoria va a llegar, pero necesitamos que llegue cuanto antes”, aseguró.
En ese mismo sentido ahondó Gómez. “Nos vamos tranquilos por el rendimiento del equipo. Cuando estábamos 0 a 0, ampliamos los espacios y buscamos el gol con tranquilidad. Eso es rescatable”, explicó uno de los entrenadores, visiblemente ofuscado por la forma en la que su equipo le dio vida a los santiagueños. “Nos deja intranquilos la irresponsabilidad que cometimos que generó que nos empaten el partido porque tras la expulsión quedamos con casi todos jugadores ofensivos. La inteligencia debe prevalecer en todo momento”, resaltó.
“El torneo es largo y te da chance para recuperarte. Pero tenemos que ganar un partido para que los jugadores puedan trabajar con más tranquilidad. Esperamos que racha negativa se corte rápido”, aseguró un allegado a la CD.
Todos apuntan a que la primera victoria pueda concretarse el domingo, en Villa Crespo. Aunque claro, para eso el “Santo” deberá mejorar algunos puntos que no dejó conforme a nadie.
A diferencia del equipo que edificó la gran campaña, el actual parece muy previsible a la hora de atacar. Salvo en los complementos, con los ingresos de Emanuel Cuevas, Leandro Vella y con González como referencia ofensiva, San Martín parece muy previsible en ataque.
Sin velocidad ni sorpresa y con poca gente pisando el área rival, marcar un gol se le hace cuesta arriba. “A veces los cambios tienen que generar eso”, se defendió Gómez.
Si el equipo jugará con cuatro o cinco defensores, sin volante tapón o con uno, dos o tres puntas, será materia de análisis, durante esta semana, de una dupla técnica que cuenta con el aval de la nueva dirigencia.
El objetivo debe ser encontrar el equipo ideal. Ese que tenga el equilibrio justo para romper el maleficio y volver a encontrar la sonrisa.
Sin lesión
Ignacio Arce debió salir en el entretiempo por un dolor en el aductor izquierdo. La ecografía reveló que solo padece una contractura, por lo que llegaría al partido del domingo.