Nadie está completamente a salvo de la desgracia. Le puede tocar a cualquiera, en cualquier momento y lugar. La realidad hoy nos encuentra en un punto de no retorno: la vida de un adolescente se ha perdido. Independientemente de los detalles y las responsabilidades del caso, que están siendo investigados por la Justicia, el fallecimiento del joven de 15 años durante su primera práctica de rugby es una señal de alerta que interpela a todo el deporte tucumano, no solo a los clubes de rugby. Lo que sucedió pudo haber ocurrido en cualquier otro club de cualquier otra disciplina de entre las muchas que se practican en la provincia, y es menester tomar las medidas que sean necesarias.
En 2017, Tucumán se adhirió a la ley nacional 27.159, que establece un sistema de prevención integral para los casos de muerte súbita, instituyendo entre otras cosas la obligatoriedad de instalar un Desfibrilador Externo Automático (DEA) en locales públicos y/o privados de concurrencia masiva. A fines del año pasado, se incluyó en el alcance de la norma a los establecimientos deportivos, gimnasios, clubes deportivos y sociales y espacios que en general destinados a la actividad física y/o deportiva, a la vez que se ordenó la realización de una capacitación y actualización anual con certificación.
Un relevamiento hecho por LA GACETA reveló que los clubes deportivos que cuentan con personal capacitado y con el equipamiento necesario para responder adecuadamente en estos casos de emergencia son la excepción y no la regla. Por supuesto, no todos están en condiciones de afrontar el costo de un DEA; para algunos, la supervivencia es día a día y difícilmente puedan acceder a ese equipamiento sin ayuda del Estado. Sin embargo, sí es importante hacer énfasis en la importancia de la capacitación en maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) y primeros auxilios, cuya aplicación a tiempo puede salvar vidas. Más aún en el contexto de una pandemia que ha dejado secuelas en muchos deportistas.
Por caso, a fines de agosto se organizó en el club Amalia una jornada de capacitación destinada a entrenadores y preparadores físicos, organizada por la Municipalidad de la capital conjuntamente con la Sociedad Argentina de Cardiología. La intención es realizar este tipo de capacitaciones una vez al mes hasta abarcar todos los clubes de fútbol de San Miguel de Tucumán. Sería bueno que dichas capacitaciones también pudieran brindarse en otros deportes.
Los propios clubes deben tratar de interiorizarse en el tema y avanzar en la capacitación en primeros auxilios y RCP a quienes tienen a su cargo a los deportistas. Hay cursos de diferentes amplitudes que se pueden contratar (como los que ofrece la Dirección de Emergencias Sanitarias del Siprosa), pero también existe abundante información de acceso libre y gratuito en internet. En la página del Ministerio de Salud de la Nación se pueden encontrar videos, tutoriales y folletos descargables sobre cómo proceder en diferentes escenarios de emergencia, así como en la página del Ministerio de Salud Pública de Tucumán.
Por otro lado, también cabe recordar la conveniencia de realizarse chequeos y estudios cardiológicos antes de iniciarse en una actividad deportiva, incluso si no nos los exigen, y sobre todo después de haber padecido covid-19.