Los tucumanos deberán prepararse para un verano con recurrentes cortes de electricidad. Es que a los problemas estructurales por la falta de inversiones para el transporte de energía, se sumó ahora una situación tan inédita como increíble: la rotura de una línea de alta tensión por parte de una empresa contratista de la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT).
Aunque suene irrisorio, es real: el corte de esos cables subterráneos que transportan 132.000 voltios puede condenar a buena parte de los tucumanos a padecer en los días de calor que se avecinan hasta bien entrado el verano. Esto, debido a que la empresa Transnoa SA planteó ante las autoridades que la reparación de esa línea demandaría alrededor de dos meses.
"En el caso de Tucumán, adicional a las altas temperaturas que generan una mayor demanda de electricidad y por ello se exige a las instalaciones, Transnoa SA tuvo un evento particular: haciendo una obra le rompieron un cable. Eso genera un problema serio de vínculo en buena parte de la capital", resumió Santiago Yanotti, vicepresidente de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa).
El funcionario confirmó que el tiempo que demandará el arreglo es aún incierto. "Ayer el subsecretario de Energía Federico Basualdo me dijo que iba a pedir a Transnoa SA que acelere los tiempos, porque nos habían dado más de dos meses de obra y eso iba a generar que ante altas demandas de electricidad, que coinciden con las altas temperaturas, pueda haber cortes. Hacía muchos años que en Tucumán no había cortes programados de electricidad por no poder abastecer la demanda", amplió el ex titular del Ente Regulador de los Servicios Públicos de Tucumán (Ersept).
En efecto, los cortes programados que la empresa distribuidora EDET SA dispuso el martes en toda la provincia se originaron a partir de la rotura de esta línea, que va entre las estaciones transformadoras Independencia y Estática. Como el sistema de transporte de Tucumán presenta ya de por sí limitaciones para el normal abastecimiento de la provincia y de la región, este "pinchazo" agravó el cuadro de situación. Dicho en "criollo": si bien en la provincia se produce la cantidad necesaria de energía para cumplir con la demanda, hay un problema de distribución porque los vínculos de abastecimiento entre las estaciones "Bracho-Cevil Pozo y "Bracho-Independencia" funcionan con restricciones desde hace tiempo. Es decir, los cables van colmados en su capacidad y no pueden transportar más electricidad. Sumado a este problema estructural de cómo transportar la energía, se produjo ahora la rotura del cable subterráneo en avenida Américo Vespucio y Buenos Aires por parte de una firma contratista de la SAT.
Fuentes oficiales confirmaron además que debido a este imprevisto se debió modificar el esquema de alimentación al Gran San Miguel de Tucumán (incrementando la dependencia de la generación de Salta y sobrecargando el resto de las líneas de transporte). Por esto, el resto de las estaciones transformadoras que alimentan a la Capital y a sus alrededores verán restringida su capacidad de suministro en caso de que haya altas temperaturas y, en consecuencia, una mayor demanda de electricidad. En síntesis, estas estaciones operarán al límite hasta tanto se solucione el corte por parte de la empresa Transnoa.
A principios de semana, en un comunicado sin mayores precisiones, EDET SA había deslindado responsabilidades. "Los recientes cortes de servicio responden a dificultades en las instalaciones del sistema de generación de energía y en el sistema de transporte de la región noroeste, a cargo de Transnoa S.A. Ese abastecimiento es el que permite a nuestra institución realizar una correcta distribución entre la población”, habían expuesto. Y ampliaron: "La situación mencionada se ve agravada por limitaciones coyunturales en el sistema de transporte de nuestra provincia, a raíz de que existe un vínculo de alta tensión (un cable subterráneo de 132.000 V) fuera de servicio. Este cable fue dañado como consecuencia del impacto de una obra".
Ahora bien, ¿de qué se encarga Transnoa SA? Desde el 26 de enero de 1994, esta firma debe operar y mantener la red de transporte de energía eléctrica en el NOA, según la concesión otorgada por el Poder Ejecutivo Nacional. Por eso, estos inconvenientes fueron abordados esta semana en la Casa Rosada por el vicegobernador a cargo del Poder Ejecutivo, Osvaldo Jaldo; y el jefe de Gabinete de la Nación, Juan Manzur. En Buenos Aires también se reunieron en estos días directivos de EDET SA, de Transnoa SA y funcionarios nacionales de Energía y del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE).
Por ahora, la solución a corto plazo a los problemas de suministro no aparece como una opción clara. Principalmente, por la complejidad de la obra de reparación que debe concretarse, ya que muchos de los componentes son importados y porque debe efectuarse con operarios especializados. "Vamos a tratar de acortar los plazos de obra, pero lamentablemente es un cable de alta tensión y no es que está accesible en el mercado, que uno va y compra tantos metros, hay que hacerlos hacer. Estaban buscando alguna solución técnica alternativa, pero realmente el mayor problema que padece hoy Tucumán tiene que ver con esa rotura", sostuvo Yanotti.