Cruje Juntos por el Cambio Tucumán (JxC). Las diferencias políticas entre Germán Alfaro y Roberto Sánchez están más marcadas que nunca. Los sectores que lideran el intendente y el diputado se repelen como los mismos polos de un imán. Se dañaron los canales de diálogo que se habían tendido meses atrás. No se observa una voluntad unificada -al menos en lo inmediato- de ajustar los eslabones para soldar una coalición opositora. De hecho, no todos llegarán a la reunión “ultimátum” con un mandato partidario para integrar una alianza de cara a 2023. Es una incógnita lo que pueda surgir del encuentro de mañana a las 10, en el Hilton. Incluso, hay quienes arriesgan que el mitin puede durar pocos minutos porque no se llegará a nada.
El Partido por la Justicia Social (PJS) es uno de los espacios que muestra más prisa por concretar el armado del frente. Alfaro confirmó que asistirá al encuentro para cumplir con la palabra empeñada. Irá dispuesto a rubricar que su partido saldrá en 2023 dentro de JxC. “Nosotros vamos a ser parte del frente. Porque el que no firma el frente no puede participar de la interna”, avisó en noviembre. Y dirigentes de su espacio sostienen que la decisión está más sólida que nunca. “Mañana se firma con los que estén; vamos a ver quiénes somos”, desafiaron. Agregaron que no tienen intenciones de resolver en esa mesa cómo se definirán a los candidatos.
El propio intendente reconoció aquel 15 de noviembre que las diferencias con Sánchez ingresaron prácticamente en un callejón sin salida. “Yo estoy más cerca de ir a una interna que de cualquier otra cosa”, sentenció entonces a LA GACETA. Ambos dejaron en claro que no están dispuestos a ceder y tampoco hay diálogo. Hoy parecen más las razones que los alejan que las que los unen, pero ambos saben que separados no llegarán lejos si el oficialismo va unido. Mucho menos a la Casa de Gobierno.
El enigma radical
La gran incógnita del encuentro de mañana será conocer la postura que tomará la Unión Cívica Radical (UCR). La convención del partido centenario no se reunió, por lo que sus autoridades no están autorizados a firmar la conformación de la alianza. Los radicales dejaron saber que no tienen apuro por poner "el gancho” dado que hay tiempo en el cronograma electoral (en marzo vence la presentación de frentes). Pretenden que antes acuerden bajo qué metodología se definirán las candidaturas. Se adelantó también que en el mitin de mañana, a diferencia de otros encuentros, enviarán a varios dirigentes de reparto.
El intendente yerbabuenense Mariano Campero adelantó que solicitarán que se cumpla con las pautas que planteó la mesa nacional de Juntos por el Cambio: que las encuestas sean el primer método para resolver las candidaturas y, en caso contrario, que se garantice una interna abierta. “Estamos muy seguros de nuestros candidatos, están mejor posicionados”, marcó. A su vez, aseguró que harán “todo lo que esté a nuestro alcance” para consolidar JxC, para ser lo más amplios posible. A su vez, destacó la sinergia que hay con los intendentes Alejandro Molinuevo (Concepción) y Sebastián Salazar (Bella Vista), así como el apoyo del sector privado, con Sebastián Murga (CREO) a la cabeza, y los referentes de trayectoria, como José Cano, Silvia Elías de Pérez y Alberto Colombres Garmendia (PRO), entre otros.
Visiones distintas
En un móvil con LG PLAY, Campero expuso las diferencias políticas que tienen con el alfarismo. Señaló que Alfaro fue la continuidad de un gobierno, mientras que los tres intendentes radicales tuvieron gestiones con nuevos equipos.
Resaltó que Sánchez cumplió con su palabra al asumir como diputado, algo que no hizo el líder del PJS (renunció y su esposa, Beatriz Ávila, asumió como senadora). Ponderó también que en sus gestiones se priorizó la transparencia y el cuidado de los espacios verdes, algo que -dijo- no pasó en la Capital.
“Hace unos meses tuvimos una reunión, se le hizo una oferta (a Alfaro) y no se pudo llegar a un acuerdo. Nosotros no podemos parar por no ponernos de acuerdo, al contrario; entiendo que hay visiones distintas que hoy están a las claras. Nosotros tenemos nuestra posición tomada y queremos ser una opción para todos los tucumanos”, disparó.
Espíritu de coalición
Murga, precandidato a vicegobernador de Sánchez, señaló que CREO irá con mandato partidario para integrar la coalición y que estará representado por la diputada Paula Omodeo y el apoderado Jorge Giménez Lascano. Mencionó que irán con un espíritu de coalición, pero señaló que es necesario pasar a los hechos para ganar la provincia. “Quiero ser parte de la solución de Tucumán, y parte de la solución es sacar al oficialismo”, dijo.
El vicepresidente del PRO, Mariano Malmierca, y el secretario, Miguel Diosquez, concurrirán al encuentro con la autorización del consejo para firmar la conformación de una alianza. El espacio macrista, socio mayoritario del alfarismo, considera que el tiempo se está agotando y que es momento de construir una oferta electoral. “Destrabar, mejorar y avanzar es poder conversar; espero que asistan todos, nadie está excluido”, dijo Malmierca.
Desenlance incierto
Otros dirigentes del PRO, alineados con el sanchismo, se expresaron menos optimistas. Señalaron que el diputado avanza cada vez más en una esquema sin Alfaro, por lo que hoy no ve un desenlace con unidad. De todos modos, plantearon que no se puede perder de vista la presión que puede haber de la mesa nacional de Juntos por el Cambio.
¿Saldrá algo concreto del encuentro? ¿Se formalizará mañana el frente opositor? ¿La UCR podría quedar fuera de la alianza por no tener mandato partidario? ¿Se puede producir un quiebre sin retorno? Son demasiadas las incógnitas que rodean a la tambaleante mesa tucumana de Juntos por el Cambio.