A las 16, se habilitaron las puertas del "Madre de Ciudades" y para la gente fue como encontrar un oasis en el desierto. Corridas, gritos, emoción fue lo que se empezo a ver y percibir en el ambiente. Entrada y DNI en mano empezaron a atravesar uno a uno los diferentes controles para poder acceder al estadio. Lamentablemente, las caras largas, los llantos y la desilusión también fue la postal que se pudo observar.
Las estafas estan a la orden del día y lo que se vivió en el Monumental de River hace unos días se repitió en Santiago del Estero. Cientos de fanáticos se quedaron en las puertas de la ilusión: las entradas falsas también se dieron cita esta tarde.
Así, papá y mamá tuvieron que explicarle a niños pequeños que la posibilidad de ver a Lionel Messi quedará para otra ocasión.
La otra cara de la moneda, la linda. Tenia que ver con las risas y los gritos de los que terminaron de sortear los cuatro controles y corrían desesperados para acomodarse en las tribunas del estadio.
En lineas generales, el ingreso se dio de forma ordenada y pacífica, ya dentro del estadio la guaracha santiagueña empezó a armar lo que se convertira en una fiesta que se extenderá hasta cerca de la medianoche.