Hace 28 años Javier Frana se consagraba en Nottingham. Desde entonces no se registraban conquistas de tenistas nacionales sobre césped, una racha negativa que se cortó ayer en el ATP 250 de Eastbourne (Inglaterra) y de la mano de Francisco Cerúndolo. Un título inesperado -el segundo de su carrera en el circuito- y todo un espaldarazo de cara a Wimbledon, certamen que se inicia mañana con la participación de nueve raquetas argentinas.
Fue un sábado inolvidable para Cerúndolo, 19° del ranking mundial y listo para seguir escalando. El viernes, por culpa de la lluvia se había suspendido la semifinal con el estadounidense Mackenzie McDonald cuando tenía prácticamente resuelto el pleito: iba arriba 2-6, 7-5 y 5-2. Debieron salir a la cancha muy temprano y Cerúndolo liquidó el partido rápido, ganando el game restante.
A favor de Cerúndolo quedó el hecho de que su rival en la final, Tommy Paul, debió jugar los dos encuentros el mismo día. El viernes no había podido disputar ni un punto contra el francés Gregoire Barrere, al que superó ayer por 6-4 y 6-3. Horas más tarde comenzó el partido decisivo y la victoria sobre el estadounidense se concretó por 6-1, 1-6 y 6-4. El esfuerzo le pasó factura a Paul, ya que debió ser asistido por el fisioterapeuta durante el tercer set.
No puede ser mejor el envión con el que Cerúndolo llega al tercer torneo de Gran Slam del año. El sorteo determinó que debutará en Wimbledon ante el portugués Nuno Borges (68°) y de pasarlo se medirá con el checo Jiri Lehecka (36°) o el austríaco Sebastián Ofner (69°). Los otros argentinos que jugarán en Londres son Etcheverry, Báez, Coria, Cachín, Pella, Schwartzman, Juan Manuel Cerúndolo y Podoroska.