Por Martín Soto
03 Octubre 2023
REUTERS
La implementación de un botón para solicitar el derecho a réplica fue el cambio más novedoso del primer debate presidencial de 2023. Este recurso que permite responder cuando un candidato se siente aludido fue rápidamente aplicado, al punto que algunos postulantes para la Presidencia lo agotaron en pocos minutos (eran cinco para cada uno). ¿Fue desconocimiento del reglamento o una estrategia?
Especialistas en Ciencias Políticas coincidieron en que estuvo completamente premeditado. Estimaron que tanto Sergio Massa (Unión por la Patria) y Javier Milei (La Libertad Avanza) buscaron capitalizar esas cartas en el eje de Economía, que es su fuerte, y que por ese motivo usaron los cinco recursos en ese bloque. “El primer segmento era el más importante por la repercusión de Massa y de Milei. Agotar todo ahí por el contraste de ideas”, opinó Lorena Sarverry, politóloga, docente universitaria y especialista en comunicación.
En igual sentido se expresó Luis Karamaneff, politólogo e investigador del Conicet. “Sabían que se estaban quedando sin derechos a réplicas en Economía, porque son sus posiciones fuertes; nada estaba librado al azar”, dijo. Señaló que por ese mismo motivo Myriam Bregman (Frente de Izquierda) guardó esos instrumentos para el eje de Derechos Humanos y Convivencia Democrática.
Polarización
La implementación del recurso de objeción desató una puja entre los candidatos que se eligieron como blanco de sus cañones -posiblemente pensando en el balotaje-, lo que casi que obligó a Patricia Bullrich (Juntos por el Cambio) a pedir derechos a réplicas sin haber sido aludida. Algo similar aplicó Bregman. Todo eso provocó que haya derecho a réplica de réplicas de otros contrincantes, lo que puede haber terminado confundiendo al televidente.
Que la Cámara Nacional Electoral haya incluido este nuevo recurso fue algo “genial”, según calificó Sarverry. “Si no se dan esos momentos incómodos en el que uno responde encima de otro, con ruidos en la comunicación. Fue la manera más ordenada de hacerlo”, señaló. Opinó -a modo de recomendación- que tal vez sería una buena idea que en vez de que haya cinco posibilidades de réplicas se habiliten dos por candidato para cada segmento. “Hasta los mismos moderadores se pierden”, consideró.
Karamaneff, por su parte, interpretó que los candidatos estuvieron muy estructurados en Santiago del Estero. “Prácticamente se mantuvieron en los guiones. Creo que Bregman tuvo mayor capacidad de reacción en el debate, en comparación con los otros candidatos”, indicó. En contraste, consideró que fue un acierto las preguntas cruzadas porque permite o invita a un intercambio. “Los espectadores buscamos no tanto la propuesta sino lo inesperado, que alguien se equivoque o se saque. Para que después, a partir de eso, se den las discusiones en las redes, con la simplificación de los mensajes y los memes, que sirven para transmitir ideas”, dijo.
Expectativas para el domingo
Sarverry consideró que hubo mucho nerviosismo en el primer debate y que espera que el segundo, que se realizará el domingo en Buenos Aires, sea mucho mejor. Analizó que este tipo de eventos expone a la ciudadanía un menú a la carta con todas las propuestas en un tiempo limitado. Sin embargo, consideró que debió haberse contemplado Política Exterior como eje de alguno de los debates.
Respecto al segundo debate, Karamaneff también opinó que estará más interesante que el primero “Hay algunos que están obligados a responder mucho más fuerte y dejar de tener una postura conservadora, principalmente Bullrich”, dijo. Aseguró que jugará a favor de los cinco candidatos que contarán con cierto conocimiento del asunto. “Posiblemente vayan a estar más preparados. Ya vieron las repercusiones de la primera. Probablemente va a hacer que sea más interesante, mucho más rico y vistoso. Ya tienen la práctica”, estimó.
El candidato cordobés Juan Schiaretti (Hacemos por Nuestro País) no fue elegido como contrincante por los otros cuatro candidatos, pero fue el más googleado durante el primer debate. Hay profesionales que estiman que ese dato es positivo y que, posiblemente, refleja que hay electorado que no lo conocía. Y su equipo de comunicación está dispuesto a aprovechar eso, dado que publicó en sus redes un video en el que el gobernador se ríe de los memes que circularon y tuvo muchas interacciones.
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