20 Noviembre 2023
La calle Ferraz, donde se ubica la sede nacional del Patido Socialista Obrero Español (PSOE), al que pertenece el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, fue -por 17 día consecutivo- el lugar donde se concentró la protesta contra los pactos con los independentistas catalanes y la ley de amnistía. La ley de amnistía que los socialistas españoles acordaron, referida a la campaña separatista de Cataluña en 2017, para poder formar gobierno, es impulsada por los partidos de derecha y ultraderecha, pero concita un amplio repudio.
La manifestación, la última de una serie de protestas en ciudades de todo el país contra la amnistía, tuvo lugar dos días después de que el presidente del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, ganó un mandato de cuatro años con el respaldo de partidos nacionalistas catalanes y vascos a cambio de aceptar la ley.
Las autoridades cifraron en 170.000 el número de manifestantes.
Personas con la bandera española, como símbolo de la unidad nacional frente al separatismo español, y carteles que decían “Sánchez traidor”, frente a un fuerte dispositivo policial y con vallas de protección atadas con cadenas para separarlos de la sede partidaria del PSOE.
Con megáfono en mano, los asistentes han vuelto a llamar a una huelga general el 24 de noviembre convocada por Solidaridad, el sindicato que dirige Vox, el partido nostáligico del franquismo, del ultraderechista Santiago Abascal, enemigo de los socialistas.
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