18 Marzo 2024
HASTA LAS RODILLAS. Vecinos de Río Chico amanecieron con agua dentro de sus viviendas y debieron ser asistidos por las autoridades locales. LA GACETA / FOTOS DE OSVALDO RIPOLL
La pesadilla de todos los veranos en el sur de la provincia se hizo realidad una vez más en la madrugada de ayer. La enorme cantidad de lluvia que cayó en pocas horas provocó que ríos, arroyos y acequias salieran de su cauce para inundar calles e incluso hogares de varios barrios de nuestra provincia.
Lo que siguió son protocolos que en Tucumán ya se conocen: movilización de todos los recursos del Comité de Emergencia, personal de Defensa Civil y de Bomberos que salieron a la calle para contener y evacuar a las cientos de familias afectadas. Estas fueron trasladadas a centros integradores comunitarios o escuelas.
El ministro de Desarrollo Social, Federico Masso, tras recorrer las localidades complicadas, confirmó que serían más de 500 las familias evacuadas. “Esta es la primera inundación fuerte que hemos tenido este 2024, luego de episodios que habían sido aislados al final del año pasado, pero estábamos preparados para afrontar estas situaciones”, comentó el funcionario.
Damnificados
Aguilares fue una de las zonas más perjudicadas luego de que los ríos Medina y Chico y el arroyo Barrientos aumentaron notablemente su caudal. Por ello se evacuó a varias personas que residen en sus cercanías y se cortó la ruta 331.
PLATO CALIENTE. Una de las familias evacuadas almuerza bajo un gazebo.
En Santa Ana, el número de evacuados ascendió a 300, y en la ciudad de Concepción el agua afectó los barrios Alvear, Concepción 3 y Policial. Esto se debió al desborde de la acequia Los Méndez, afluente del río Chirimayo.
En Famaillá se informó que en los barrios El Palmar y San Francisco hubo viviendas en las que entró el agua como consecuencia de las intensas lluvias, pero sus moradores prefirieron no ser evacuados.
El ministro Masso comentó que las tareas a su cargo consistieron en brindar comida y abrigo a quienes sufrieron la fuerza del agua, apoyándose en los comedores de las escuelas de la zona.
“Podemos decir que la situación está controlada y el lunes (por hoy), a medida que nos lleguen los relevamientos finales, vamos a seguir asistiendo desde Concepción a quienes lo requieran” -anticipó-. Los que tengan que permanecer evacuados lo harán, porque ya cuentan con los elementos necesarios”. Colchones, frazadas y alimentos se habían dispuesto para la tarea.
Víctima fatal
Aguilares se convirtió en el escenario de la historia más dura de la jornada: falleció Víctor Leiva, un vecino de 70 años, cuya muerte se confirmó tras haber sido evacuado de su hogar.
“Sucedió a media mañana, en el barrio Hostería; se intentó reanimarlo en la guardia del Hospital Regional de Aguilares, pero ya no había nada que hacer por él”, confirmó en declaraciones a LA GACETA el director del centro asistencial, Rodolfo Cecanti.
ODISEA PARA CIRCULAR. Llegar a Aguilares y zonas aledañas fue un desafío a causa del desborde de los ríos.
“Él vivía solo y su familia fue a buscarlo cuando se enteraron de que el barrio estaba inundado”, agregó Cecanti, para indicar que las causas de su deceso, al cierre de esta edición, permanecían en investigación.
En tanto, el Servicio Meteorológico Nacional pronostica días inestables al menos hasta el miércoles. Las precipitaciones seguirán en medio de máximas de 30°. Además, se esperan tormentas fuertes en las noches de hoy y de mañana. (Producción periodística: Ariane Armas)
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