Comenzó como rugbista, en Atlético Tucumán no le dieron oportunidades y hoy es arquero de Independiente

El fútbol es considerado el deporte más populares del país. Y en ese sentido, miles de jóvenes construyen sus sueños con el objetivo de llegar a ser profesionales. Consolidarse en Primera no es nada sencillo e implica cumplir varios requisitos; entre ellos probar suerte en diferentes clubes y dejar atrás la zona de confort. Ese es el caso de Martín Leal, quien viajó de Tucumán a Buenos Aires para instalarse en las inferiores de Independiente.

El oriundo de Alderetes se desempeña como arquero en la Quinta División del “rojo” y, debido a su buen rendimiento, ya tuvo la oportunidad de entrenarse con el plantel profesional que dirige Carlos Tevez. Sin embargo, para llegar a este presente tuvo que alternar entre buenas y malas; sobre todo tratándose de un deporte que aprendió a amar con el paso del tiempo.

“Empecé jugando rugby en Cardenales. Pero después, cuando tenía 10 años, me incliné por ser arquero en Argentinos del Norte. Allí estuve hasta los 13 y después pase a Atlético. En mi familia son todos futboleros. Jugaba los dos deportes, pero me decidí por el fútbol porque me atraía y me apasionaba más”, le dijo Leal a LA GACETA sobre sus inicios con la ovalada. “En esa edad no sentía mucha diferencia, pero después vi que hay más roce cuando jugás al rugby”, añadió.

Finalmente tras haberse decidido por el fútbol, Martín llegó al complejo del “decano” para ver si se aseguraba un lugar en las inferiores. “Mi papá me había conseguido una prueba con Omar Vallcaneras, el encargado del departamento de captación. Recuerdo que tuve que ir como a seis o siete partidos hasta que, en 2022, finalmente quedé. Estuve en la Séptima alrededor de ocho meses, pero no llegue a sumar ni un minuto”, se lamentó sobre aquel momento en el que vio frustrado su sueño de ser futbolista profesional.

Así pasaron los meses y el mayor de tres hermanos (Joaquín -15 años-, Facundo -12- y María Victoria -7-) siguió los consejos de papá Juan y armó las valijas para probar suerte en Buenos Aires. En ese sentido, la primera parada fue Rosario. “Decidí dejar Atlético porque no me daban oportunidades y estaba muy bajoneado mentalmente. Ya no tenía ganas de seguir ahí y fui a entrenarme por mi cuenta en un predio que se llama Sport Camp de Lules”, explicó Leal, que detalló lo sucedido en tierras rosarinas.  “Mi papá y el profesor Bruno Vergara me llevaron a Buenos Aires para buscar un club. Primero llegamos a Rosario para intentar en Newell’s, pero eran muchos arqueros y no me daban pensión. Me había sentido bien en la prueba y muy superior a los chicos que estaban”, aseguró el guardameta, confeso hincha “decano” que no se rindió y decidió quedarse unos días más en CABA.

De esa manera, se enteró de una prueba en el conjunto de Avellaneda y no dudó en presentarse. Para colmo, luego de una excelente performance, quiénes decidieron que se quedaría en el “rojo” fueron los coordinadores y ex referentes en el puesto de arquero: Miguel Ángel Santoro y Hugo Tocalli.

A pesar de lo que significa que estas dos figuras apuesten por uno, Leal no se adaptó a la vida en la pensión y sólo tenían en mente regresar a su hogar. “Después de unos días ya me quería volver a Tucumán. En ese momento nunca había estado en una pensión ni tan lejos de mi familia. Sin embargo, ellos me hablaron y me cambiaron la forma de pensar”, dijo el joven de 17 años. “Tocalli me dijo: ‘el tren pasa sólo una vez’. Además me explicó que él también había salido de un pueblo chico de Córdoba y que había tenido pasos por pensiones. Me comentó que, al igual que yo, lloraba por las noches y que por eso me tenía que hacer fuerte”, expresó.

Proceso de adaptación

Ya instalado en las divisiones inferiores de Independiente, empezó a disfrutar del día a día. Los viajes, las charlas con los compañeros y hasta el propio desafío de enfrentar a rivales fuertes.

Apodado “Toro” debido a los 188 centímetros de altura, Leal busca sumar la mayor cantidad de minutos con el buzo de arquero; sobre todo en relación al tiempo que no pudo jugar por la inhibición que había recibido el club. En ese momento, su familia y compañeros Joshua Velárdez y Josías Palais fueron sus sostenes para mantenerse bien fuerte y arriba.

“Empecé en Sexta y ahora estoy en la Quinta, que es dirigida por Martín Di Diego. El año pasado disputé 10 partidos y actualmente voy jugando dos”, dijo. “Si te tengo que decir qué rivales complicados hay en las inferiores, sin dudas son Vélez, Belgrano y River”, explicó, dejando en claro que el duelo contra al clásico rival Racing es siempre “picante”.

Momento de demostrar

Ante la falta de un cuarto arquero, Tevez se acercó a las divisiones formativas y solicitó que Martín se sumara a entrenarse con el plantel; lo que deja ver el buen nivel que viene mostrando el tucumano. “Últimamente me están rotando mucho con el plantel de Primera, y me llevan a entrenarme dos o tres veces por semana”, admitió antes de dar detalles sobre lo que fue el encuentro con la ex figura de Boca, Manchester United y Juventus.

“En uno de los primeros entrenamientos tuve la oportunidad de hablar con ‘Carlitos’. Se me acercó y me dijo que aprovechara las oportunidades. Que no me pusiera nervioso, que esté tranquilo y que haga lo que sé hacer. Nunca me imaginaba tenerlo tan cerca. Cuando hablás con él, te tiemblan las piernas; es algo único. Es muy difícil explicar con palabras lo que genera”, explicó sobre el vínculo con “Apache”. “Tengo muchos amigos que son hinchas de Boca y que todo el tiempo me están preguntando por Tevez. Me piden camisetas, autógrafos y fotos. Pero ‘Carlitos’ es un tipo serio y no me animo a pedirle nada porque me da vergüenza; además de un poco de miedo, claro”, dijo entre risas.

Apadrinado

En esas prácticas realizadas en el complejo “Santo Domingo”, Leal tuvo la oportunidad de intercambiar unas palabras con Iván Marcone, Federico Mancuello y Alexis Canelo, uno de los tucumanos que tiene el plantel.

“Ellos siempre me aconsejan. Es muy lindo que estén tan pendientes y se interesen en un chico”, admitió el chico que tiene como referentes en el puesto a Rodrigo Rey y Marcelo Barovero. “Con Iván (Marcone) hablo bastante. Siempre que voy trata de explicarme lo que buscan ellos en el juego como equipo y lo que quiere Carlos”, añadió.

Mientras que con Canelo, es una relación que pasó a ser una amistad. “Tengo fotos con él y me ayuda bastante. Alexis también es de Alderetes y siempre está en contacto conmigo. Me manda mensajes, me pregunta cómo me fue en el día a día y si necesito algo”, aseguró sobre el ex Almirante Brown y Quilmes.

Con los objetivos claros Martín, que se caracteriza por el juego aéreo y por tener una buena salida con los pies, aseguró que espera seguir teniendo rodaje. Eso sí quiere ir de a poco. “Sé que el sueño de todos es debutar en Primera y tener un contrato profesional. Sin dudas que sería lo ideal, pero no hay apuro”, concluyó el tucumano que empieza a dar sus primeros pasos en el arco del “rojo”, así como lo hizo un tal “Dibu” Martínez hace varios años, también en Avellaneda.