El alzheimer es una de las enfermedades que más interrogantes genera en la ciencia que aún investiga para explicar con certezas sus causas y encontrar su cura. En este marco, un descubrimiento reciente dio a conocer un nuevo síntoma que pueden presentar los pacientes y anticipan el diagnóstico de la enfermedad.
Se trata de una investigación publicada en la revista JAMA Ophthalmology que sugiere que con la angiografía por tomografía de coherencia óptica (OCT) -un examen ocular simple que se realiza en la mayoría de las clínicas- puede ser posible identificar el alzheimer en personas que aún no muestran síntomas de la enfermedad, lo cual permitiría anticipar el tratamiento y posponer el daño.
Las señales del alzheimer en los ojos
La investigación en cuestión se llevó a cabo con pocos participantes (32), pero otros estudios también han encontrado signos de cambios en el centro de la retina y en el nervio óptico de personas con alzheimer.
En 2020, un estudio publicado en la revista Alzheimer’s Research & Therapy indicó que la presencia de la enfermedad neurodegenerativa en etapa temprana también puede ser detectable mediante la recolección de muestras de líquido ocular.
En un estudio de febrero de 2024, se descubrió que la pérdida de sensibilidad visual puede predecir la demencia 12 años antes de ser diagnosticada. Al comienzo de la investigación, publicada en la revista científica Scientific Reports, se pidió a los participantes que realizaran una prueba de sensibilidad visual. Para la prueba, tuvieron que presionar un botón tan pronto como vieron que se formaba un triángulo en un campo de puntos en movimiento. Las personas que desarrollarían demencia tardaron mucho más en ver este triángulo en la pantalla que las personas que permanecerían sin demencia.
De qué manera el alzheimer afecta la visión
– La capacidad de ver los contornos de los objetos (sensibilidad al contraste);
– Discriminación entre determinados colores (la capacidad de ver el espectro azul-verde se ve afectada al inicio de la demencia);
– Otro signo temprano de la enfermedad de alzheimer es un déficit en el «control inhibidor» de los movimientos oculares, en el que los estímulos que distraen parecen captar la atención más fácilmente. Las personas con alzheimer parecen tener problemas para ignorar los estímulos que distraen, lo que puede manifestarse como problemas para controlar los movimientos oculares;
Además, las personas con demencia tienden a procesar los rostros de personas nuevas de manera ineficiente.