Esto es lo que le pasa en tu cuerpo cuando te acuestas sin cenar

Acostarse sin comer afecta de diferente manera a cada persona.

Esto es lo que le pasa en tu cuerpo cuando te acuestas sin cenar Esto es lo que le pasa en tu cuerpo cuando te acuestas sin cenar
03 Agosto 2024

Alguna vez te habrás acostado sin cenar y notado al despertar una sensación de hambre, o quizás hayas experimentado una mejora en tu calidad de sueño. ¿Pero cómo afecta realmente irse a la cama sin haber comido? Los científicos investigaron este fenómeno desde múltiples ángulos, con resultados que varían según el estudio. Aquí desglosamos las ventajas y desventajas de cenar justo antes de dormir.

Beneficios de cenar temprano

Una de las principales ventajas de evitar comidas antes de acostarse es la posible ayuda en la pérdida de peso. La doctora Sandra Hirsch, experta en nutrición del Instituto de Nutrición y Tecnología de Alimentos de la Universidad de Chile, explica que "cuando una persona come, se activan varios procesos metabólicos". Estos procesos, al ocurrir justo antes de dormir, pueden interferir con la degradación de grasas durante la noche, dificultando la pérdida de peso.

Riesgos asociados

Uno de los principales inconvenientes de cenar tarde es el riesgo de reflujo gástrico. La doctora Hirsch señala que "si uno come y se acuesta, el estómago no alcanza a vaciarse correctamente". Esto puede causar que los contenidos estomacales retrocedan hacia el esófago, provocando acidez, náuseas e indigestión.

Además, cenar tarde puede afectar negativamente la salud cardíaca. Un estudio presentado en el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología en 2016 encontró que cenar tarde puede aumentar el riesgo de ataque cardíaco. La investigación, dirigida por la doctora Ebru Ozpelit de la Universidad de Dokuz Eylul en Turquía, descubrió que comer antes de dormir puede mantener alta la presión arterial y estimular la producción de hormonas del estrés, lo que afecta negativamente al corazón.

Impacto en el sueño

El impacto de cenar poco o nada también puede influir en la calidad del sueño. Algunas personas encuentran que dormir con hambre interfiere con un sueño reparador, ya que el cuerpo puede romper tejido muscular para obtener energía durante la noche. A pesar de que el ayuno intermitente es popular para la pérdida de peso, la falta de nutrientes puede llevar a una menor calidad de sueño para algunos individuos.

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