Video: gran expectativa por el sorteo del 0 km de LA GACETA
Esta mañana la peatonal del microcento, más precisamente en Mendoza al 600 -donde se encuentra nuestro diario- se convirtió en el escenario de sueños e ilusiones para cientos de lectores de LA GACETA que buscan ganar un auto 0 km, a través de los populares "Números de Oro". Los participantes tenían hasta las 10 de hoy para depositar sus tarjetas en las urnas y así participar del esperado sorteo, que será transmitido en vivo el miércoles, a las 11, por LG Play.
Desde temprano, ya se veía a varios lectores acercándose con la esperanza de que su tarjeta sea la ganadora. "Este es mi auto", decía confiado uno de los participantes mientras dejaba sus datos en la urna. "Siempre juego para mi esposa, pero también es para mí", expresó Armando Antonio, uno de los primeros en llegar. Él, que ya tiene un auto, sueña con poder ganar uno nuevo y mejorar su movilidad.
Otro participante, Miguel, quien lleva 30 años trabajando como canillita, compartió su historia. A sus 69 años, se traslada diariamente en bicicleta y comentó que ganar el auto sería un cambio significativo para su vida. "Ando en bici todos los días, pero me han robado dos veces. Sería lindo tener un auto para andar más tranquilo", relató. Además, bromeó sobre su "calzoncillo de la suerte", una prenda amarilla que asegura le ha traído suerte en la quiniela. "Siempre gano algo con esto", afirmó entre risas.
La emoción fue creciendo durante la mañana entre los participantes mientras las urnas se iban llenando. Algunos optaron por dejar sus tarjetas en distintos puntos estratégicos con la esperanza de que eso aumente sus posibilidades. "Es como un juego de azar, nunca se sabe", reflexionaba otro lector.
El sorteo, que se realizará en vivo, contará con la presencia de un escribano y los lectores podrán presenciarlo para asegurar la transparencia del proceso. A pesar de las bromas y supersticiones, todos coinciden en que solo el azar determinará al afortunado o afortunada que se lleve el auto.
La ilusión está en el aire, y la esperanza de que un golpe de suerte cambie la vida de alguno de estos fieles lectores crece con cada tarjeta que se deposita en la urna. ¡Que gane el mejor!