Por Jorge Figueroa
Hace 2 Hs
“DE LA CABEZA AL CORAZÓN”. Después de tantos debates sobre el uso de sus temas por los políticos, asegura que su canción queda liberada.
“No estoy en condiciones de impedir que una canción tenga el alcance que tiene, que llegue a donde llegue, que la escuche quien la escuche. Yo hago una canción y la libero”, le dice Gustavo Cordera a LA GACETA.
El músico cantará esta noche en el Teatro Mercedes Sosa (San Martín 479) desde las 21, presentando su último disco “De la cabeza al corazón”. Los socios de Club LA GACETA tendrán 2x1 en entradas.
El “Pelado” responde la entrevista mientras conduce por la ruta en un tour que recorre también Salta y Jujuy. Tiene tiempo para demostrar su conocimiento de algunas corrientes psicológicas, cuando menciona “la característica egoica”, porque no oculta que se analiza y que tiene cambios emocionales.
En 2003 Néstor Kirchner asumió con el tema “La argentinidad al palo”; en 2017 Cristina Fernández ingresó a un acto de campaña electoral con “El viento trae una copla” y Mauricio Macri con “La bomba loca”. Y Javier Milei cerró su show en el Luna Park (en mayo pasado) con “Se viene el estallido”.
- Te molesta o te incomoda que utilicen temas tuyos candidatos o políticos…
- Hago una canción y la libero. Sea político, religioso, economista o cualquier persona de la calle. Y que cobre la vida que cobra para las hinchadas de fútbol, son canciones populares, son de todo el mundo pertenece a todo el mundo no puedo discriminar vos sí, vos no; esas canciones son de la gente. Le pertenecen a la gente y muchos las van a utilizar a su favor. Y si las toman, por algo las toman.
- Le dijiste a una revista que era tu último disco, entonces, ¿terminas tu carrera y regresas a La Paloma (en Uruguay, donde está viviendo)?
- Es una sensación que tuve y la compartí con la gente, la sensación de que es el último disco, muchas veces me ha pasado, pero lo que ocurre es que se va haciendo más fuerte en la medida que van pasando los años.
-Te imaginás como Charly García. Vos tenés 62 años.
- No me imagino un futuro como Charly García, me imagino un futuro como Gustavo Cordera, o sea, estoy construyendo el mío, que es distinto. Mientras el fuego creativo esté en mí seguiré haciendo canciones, eso seguro. No sé si discos, pero sí canciones. Casualmente, mirá, ayer regalé una canción en Instagram la tiré y me parece que voy a empezar a hacer eso, a regalar canciones.
- “Me pide bomba, me pide sexo, sexo con soda y si no hay más, llora”. Un eterno reclamo, entre el deseo y la insatisfacción.
- Esa canción es justamente ‘Canción para mi cabeza’, es un momento en que estoy teniendo un diálogo con mi propia cabeza; un encuentro con mi propia cabeza con la cual entablo un diálogo. Un diálogo en la canción que es muy divertido y es ese diálogo interno, ese parloteo interno que todos tenemos todos los días y que nos persigue.
- ¿Y qué pasa con el ego que declaraste que es un mecanismo de defensa?
- El ego es un mecanismo de defensa, no lo digo yo, lo dicen todas las corrientes filosóficas y psicológicas de la humanidad, es una herramienta con la cual nosotros podemos sobrevivir y subsistir, y funciona muy bien en estado de supervivencia y no tan bien en estado de expansión. Cuando uno quiere expandirse desde el ego, se encuentra con una coraza que no lo permite. Entonces, eso está en todos los manuales de psicología y de filosofía. Simplemente lo describo desde el punto de vista artístico, y mucho en las canciones. Creo que eso tiene que ver con lo que es la personalidad, una característica egoica con la cual nosotros nos identificamos y bueno, todos tenemos uno, dicen que es un buen empleado pero un muy mal patrón.
Gustavo Cordera, que lanzó su primer disco con Bersuit Vergarabat en 1992, revisita canciones que publicó con la banda en este milenio.
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