El ex presidente de la Nación, Eduardo Duhalde, le respondió este sábado a Javier Milei, quien lo acusó de ser partidario de un golpe de Estado contra Fernando de la Rúa en 2001, en supuesta complicidad con Raúl Alfonsín.
En diálogo con Radio Mitre, el ex mandatario afirmó que el libertario "tiene problemas con todo el mundo" y que debería parar de pelear porque, si sigue así, "el final puede ser malo". También negó cualquier intento golpista en su momento y sostuvo que con De la Rúa tenían una relación "casi amorosa" y "buena".
"El Presidente es así, no puede estar sin pelear. Estos días fue conmigo y después tiene problemas con todo el mundo. No puede vivir sin pelearse", afirmó.
Luego, agregó que en sus más de 50 años de vida política no se enemistó con nadie y que solo una vez le dijo a un ex presidente -por Alberto Fernández- que estaba “grogui”, y después le pidió disculpas personal y públicamente.
"Las cosas empiezan así y no se sabe cómo terminan. La violencia verbal puede, y ojalá no pase, terminar en otro tipo de violencia, que es lo que tenemos que evitar. No sirve para nada. Sirve sí para poner en riesgo que haya más violencia. Hay mucha en la sociedad, originada porque a muchos no les alcanza para vivir, y eso acá y en el mundo genera más actos de violencia, robos... Yo creo que el Presidente tendría que replantearse, repensar, que así, con esto, el final puede ser malo. Yo no quiero, por supuesto", sostuvo.
La fuerte respuesta de Eduardo Duhalde a Javier Milei
Convencido de que el líder libertario "va a pasar a la historia como el Presidente que más peleas generó", Duhalde insistió con que es "inconducente" esta actitud y comentó sobre el rumbo de la gestión actual: "Él entiende de una cosa que yo no, la macroeconomía, pero sí entiendo de la microeconomía, que está muy mal. Le pregunto a los intendentes amigos y de otros partidos si la gente está enojada y me dicen que no, que está triste. Hay una tristeza en la sociedad muy grande y habrá que ver qué pasa ahora, pero no esperen que yo me pelee con el señor presidente, porque yo no me he peleado con nadie".
Seguro también Duhalde de que los argentinos volverán a unirse, se inmiscuyó en lo que pasó en la crisis de 2001, cuando dimitió De la Rúa, y en los momentos posteriores, en los que pasaron cinco presidentes en 11 días, entre ellos, él.
"Llegará el momento en que los argentinos volvamos a encontrarnos, cosa que me tocó hacer a mí. En 2001 fuimos en 11 días cinco presidentes. Y cuando elegimos a Adolfo Rodríguez Saá festejamos con mis amigos porque me había salvado, pero a la semana Adolfo renunció y me llamó Don Raúl Alfonsín. Y me dijo: ‘Eduardo, mañana asume’. [Le respondí]: ‘Ni en pedo, Raúl, yo no sé gobernar peleándome’. Tanto en el municipio como en los ocho años de gobernador, siempre lo he hecho gobernando con todos", comentó, contra la versión de Milei de que Alfonsín y él habían planeado un contexto para que De la Rúa se fuera.
Incluso, Duhalde aseveró sobre aquellos tiempos: "Con De la Rúa tuve una relación casi amorosa, lo conocía tanto, yo lo consideraba mucho. Fue un hombre honesto, que tuvo la desgracia de que su vicepresidente [por ‘Chacho’ Álvarez] renunciara denunciando sobornos en el Senado. Cuando llegó 2001, él estaba convencido de que había que seguir con la convertibilidad. Quien les habla estaba convencido que había que salir".
Sobre esto último, el ex presidente contó que Alfonsín lo invitó a una reunión con diez empresarios "muy importantes" del radicalismo y que todos decían "que ya no aguantaban más" con ese plan económico. "A partir de ahí decidimos crear el Movimiento Productivo Argentino, para llevárselo al presidente de la República (De la Rúa), porque estábamos convencidos de que la salida estaba por la producción. Lo creamos en junio de 2001, se lo enviamos, y el ministro que se lo llevó, muy amigo de Alfonsín, nos dijo: ‘Como que (De la Rúa) no entiende, no firma nada’. Estaba mal. Después de dejar de ser presidente se puso bien de nuevo y con el estudio jurídico que tenía con una abogada de Lomas ya estaba bien. Y conmigo... ¡una tan buena relación!".