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Un hombre debió acceder a que le cortaran la pierna tras un complejo operativo de rescate. Policía de Tasmania
Personal médico determinó que debían amputar la pierna de un turista para poder liberarlo de un escenario sumamente crítico. El hombre que se encontraba realizando una aventura de descenso en un río en el sudoeste de Tasmania debió ser sometido a un operativo de auxilio de 20 horas en la cual los expertos determinaron que debían cortar su miembro inferior.
Lo que pretendía ser un día de diversión terminó en una tragedia cuando un hombre debió acceder a una amputación de su miembro inferior debido a la compleja situación en la que se hallaba. El turista de 60 años había quedado atrapado entre las rocas en los rápidos del Río Franklin en el sudoeste de Tasmania. Este se encontraba realizando una aventura de rafting con sus amigos cuando resbaló el viernes por la tarde, expresó el comisionado interino Doug Osterloo.
Una aventura terminó en catástrofe: luego de una experiencia de rafting, un hombre perdió la pierna
De acuerdo con las fuentes, su reloj inteligente realizó una llamada de auxilio aproximadamente una hora después del accidente, proporcionando a los rescatistas su ubicación. Cuando llegaron a la escena, los socorristas descubrieron al hombre parcialmente sumergido en el agua. Allí comenzaron los intentos de liberarlo. Entre la tarde del viernes y la mañana del sábado los especialistas llevaron a cabo un intenso operativo de rescate pero todos los esfuerzos fueron completamente insatisfactorios.
Un equipo médico permaneció con él durante todo el rescate y determinó que su condición estaba empeorando. “Esta era una situación de vida o muerte y se tomó la decisión, en consulta con el paciente, de amputarle la pierna para poder sacarlo de la grieta entre las piedras”, dijo Oosterloo.
El hombre accedió a que le amputaran la pierna para poder ser rescatado
“Se lo describió en estado crítico, sin embargo, el asesoramiento médico precisó que si hubiera permanecido en el lugar donde estaba y atrapado en aquella grieta, no habría sobrevivido”, explico el oficial. El hombre fue sedado mientras le amputaron la pierna izquierda por encima de la rodilla. Charles Wendell-Smith, de Ambulance Tasmania, destacó que sus colegas describieron al hombre como resiliente y positivo durante los intentos de rescate.
“La escena era una ubicación increíblemente desafiante en el entorno remoto y austero del suroeste de Tasmania, en el río Franklin”, dijo Wendell-Smith. “No solo estuvieron expuestos toda la noche con comunicaciones limitadas, sino que también estaban en una ubicación precaria con muchos peligros y riesgos a su alrededor”.
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