![Gonzalo Cabrera Terrazas](https://imgnovel.lagaceta.com.ar/fotos/avatar_lector/573128/573128_20230316114534.jpg)
![BUEN PARTIDO. Cuevas se puso el equipo al hombro y fue el encargado de generar juego. Además, se mostró solidario a la hora de marcar.](https://imgnovel.lagaceta.com.ar/fotos/notas/2025/02/13/1200x800_buen-partido-cuevas-se-puso-equipo-al-hombro-fue-encargado-generar-juego-ademas-se-mostro-solidario-hora-marcar-1070950-112534.webp)
La victoria contra Colón no sólo significó la clasificación a la siguiente fase de la Copa Argentina, sino que también dejó en evidencia la evolución que tuvo el equipo dirigido por Ariel Martos. Con un rendimiento superior al del debut en la Primera Nacional, San Martín de Tucumán mostró mayor solidez y empieza a construir una identidad de juego que ilusiona a los hinchas.
Si bien todavía hay aspectos por mejorar (como la generación de juego y la toma de decisiones en ataque), el equipo exhibió orden, intensidad y solidez defensiva, elementos fundamentales para afrontar los desafíos de la temporada.
Contra el “Sabalero” en el Nuevo Monumental, San Martín se mostró más equilibrado y seguro. La modificación en el esquema (4-2-3-1) le permitió mayor fortaleza defensiva y dio libertad a los jugadores ofensivos para desplegar su juego. En el mediocampo, Gustavo Abregú y Matías García fueron claves en la recuperación y distribución, mientras que Juan Cruz Esquivel, Jesús Soraire y Juan Cuevas intentaron asociarse en ataque.
Por su parte, Martín Pino fue una pieza interesante en ofensiva. Más allá de haber fallado su penal en la definición, su desempeño en el partido dejó en claro que es el delantero referencia del equipo. “Me sentí mejor que en el debut. Llegué, tuve pocos entrenamientos y jugué, pero ahora estoy mucho más suelto. Sé que me va a tocar pelear cada pelota, y ese es mi estilo de juego”, comentó Pino, quien complicó a los centrales rivales con su potencia y movilidad.
Los laterales, que habían mostrado ciertas dudas en el debut contra Almagro, tuvieron una actuación más firme. Tanto Federico Murillo como Hernán Zuliani fueron sólidos en defensa y también aportaron en ataque cuando el equipo los necesitó.
El encuentro se definió desde los 12 pasos, en donde San Martín, además, mostró personalidad. Tiago Peñalba, uno de los pilares en defensa, convirtió el penal decisivo y expresó su felicidad. “Desde el primer momento tuve la convicción de que iba a entrar. Sabemos lo que significa Marcos Díaz como arquero, pero sólo pensaba en ejecutar bien el remate. Esta victoria nos fortalece y nos permite seguir creciendo como equipo”, dijo el salteño.
Mientras que Nahuel Cainelli, quien ingresó en el segundo tiempo y aportó dinamismo en el mediocampo, destacó la importancia del apoyo del hincha para este nuevo proceso. “Fue el primer partido que me tocó jugar con nuestra gente y es una sensación increíble. La hinchada se hace sentir y nos da un impulso extra. Ojalá podamos seguir dándoles alegrías”, anheló el ex Estudiantes de Río Cuarto.
El buen primer paso de San Martín en la temporada
El debut en la Primera Nacional contra Almagro no fue el mejor en cuanto a rendimiento, pero sirvió para que el equipo sumara confianza en su proceso de adaptación. Martos apostó por un 4-4-2 para fortalecer el mediocampo y mantener el equilibrio, pero la falta de rodaje se hizo notar.
En la primera mitad, San Martín sufrió y dependió de la solidez de Darío Sand, quien ya se había vuelto figura evitando la caída de su arco con dos grandes intervenciones. Sin embargo, en el complemento, con los ingresos de Soraire y Pino, dos de los titulares en el juego contra el “Sabalero”, el equipo ganó en presencia ofensiva y estuvo cerca de llevarse el triunfo.
“Sabíamos que iba a ser duro. Veníamos con poco tiempo de trabajo, muchos refuerzos llegaron hace pocos días y nos estamos conociendo en la cancha. Pero vamos creciendo partido a partido”, analizó Cainelli.
San Martín todavía tiene aspectos por pulir, pero su crecimiento es evidente. Martos sigue invicto, superó una prueba difícil en la Copa Argentina y su equipo empieza a encontrar un funcionamiento más sólido. “Martos nos pidió que confiemos en nosotros, que estemos convencidos de lo que estamos haciendo. Nos dijo que en los penales elijan un lugar y pateen con decisión. Ese convencimiento nos ayudó a ganar”, contó Peñalba sobre la charla previa a la tanda de penales.
Pino, por su parte, dejó en claro que el equipo tiene el carácter necesario para competir. “Hoy se vio un poco de lo que puedo aportar. Vine a pelear todas y a tratar de convertir cuando tenga la oportunidad. Nos espera un torneo duro, pero estamos listos para dar pelea”, avisó el centrodelantero que tuvo bastante trabajo con la defensa “sabalera”.
Ahora, el foco está puesto en el retorno a La Ciudadela. Con la confianza en alza, San Martín buscará seguir afianzando su idea cuando reciba a Ferro, en un partido que puede ser crucial para dar un salto más de calidad y para seguir reenamorando a sus hinchas.