Tras limpiar su imponente araña, el San Martín abrirá temporada

Los grandes teatros del mundo (principalmente los líricos) tienen un ritual anual que simboliza el inicio de su temporada: bajan la araña que domina la sala para reponer luminarias, limpiarla y realizar el mantenimiento y arreglos necesarios, para que todo esté listo y brillante para la primera función. Ayer, esa ceremonia se repitió en el teatro San Martín (avenida Sarmiento 601) del Ente Cultural de la Provincia, donde mañana tendrá lugar el concierto gratuito homenaje por el Día Internacional de la Mujer, a cargo de la Orquesta Estable de la Provincia, que marcará el debut de la cubana Yeny Delgado al frente de esa formación. Luego habrá una función de ese cuerpo por mes, siempre en la sala mayor.

El artefacto de 280 kilos está instalada desde 2012, con motivo del centenario del teatro, y desde entonces, todos los años desciende para repasar sus 35.000 cristales Swarovksy (traídos desde Austria) y cambiar los focos quemados. Como no se remueven las butacas, queda suspendida a pocos centímetros del suelo y luego de los cuidadosos trabajos con plumeros y trapos, vuelve a su lugar de lucimiento.

La araña de bronce tiene una altura de 4,5 metros, y tres círculos: el diámetro del mayor es de tres metros y los otros dos son más chicos. Hasta su montaje, en el techo de la sala sólo había un vacío que permitía suponer que, en algún momento, hubo algo en ese espacio. La construcción fue realizada por la empresa Novaluz y es la única existente de esas dimensiones en las provincias argentinas.

El simbolismo de esta costumbre se refuerza para comenzar el período de actividad habitual de los cuerpos estables, ya que, como destacó ayer el presidente del Ente, Humberto Salazar, “durante el verano no se suspendió el trabajo con distintos programas y proyectos en toda la provincia”. “La araña jerarquizó muchísimo este hermoso teatro. Siempre realizamos la limpieza en marzo, lo que nos permite repensar las acciones para cada año”, afirmó.

Agenda

En el listado de actividades programadas, puntualizó la realización del Mayo de las Letras, la Feria Infanto-Juvenil, el festival internacional de cine Gerardo Vallejo (cumplirá su 20° edición) y el Septiembre Musical, entre otras propuestas. “Son ciclos tradicionales y consolidados, que forman parte de la agenda de los tucumanos, citas obligadas e ineludibles que atraviesan las distintas áreas del Ente, como pasa -por ejemplo- cada vez que se estrena una ópera”, reforzó. Acerca del presupuesto asignado para el presente ejercicio fiscal, no recordó las cifras finales pero aclaró que habrá aportes especiales de la Provincia para los eventos.

Toda la agenda se inscribe en el eje principal para 2025, que identificó como “seguir ampliando públicos y generar nuevas audiencias en diferentes franjas etarias, sobre todo en la juventud, y llevando la cultura a toda la provincia, articulando con comunas y municipios mediante el Consejo Provincial de Cultura porque nos concebimos como un Ente de la Provincia”. En ese sentido, precisó que se repetirían las experiencias de llevar espectáculos al interior, como ya se hizo en Tafí Viejo, San Isidro de Lules y Banda del Río Salí, en coordinación con referentes de cada territorio. “Hay que pensar en formatos distintos y alternativos, como ser la música de cámara, para poder facilitar logísticamente los desplazamientos y las presentaciones en distintos espacios”, adelantó.

La ceremonia también sirvió para la presentación de los nuevos directores de los cuerpos estables del Ente. “Hemos renovado casi en su totalidad esos cargos, son muchísimas novedades importantes”, comentó. Aparte de Delgado, asumieron Juan Pablo Cadierno (al frente del Coro Estable), Martín Piliponsky (Ballet Contemporáneo), Déborah Jurkovich (Ballet Clásico), Andrea Cardoso (Coro de Niños y Jóvenes), José Pinto (Escuela Taller de Danza), Daniela Villalba (Teatro Estable) y Néstor Cano y Héctor Lizana Eraso (Banda Sinfónica de la Provincia, un semestre cada uno). “Son nombramientos con consenso de los artistas de cada cuerpo porque, como dice el gobernador Osvaldo Jaldo, ‘sin paz social no se puede gobernar’. Hay nuevas cabezas pensantes, lo que es un atractivo y un desafío renovado”, concluyó.