30 Noviembre 2012
ASAMBLEA. El dirigente Carlos Cisneros arengó a empleados de la CPA. PRENSA BANCARIA
La actividad bancaria podría complicarse durante la mañana de hoy, a raíz de un paro convocado por el gremio del sector. Eduardo Bourlé, secretario general de la seccional local de la Asociación Bancaria, confirmó ayer la medida de fuerza en todas las sucursales de la Caja Popular de Ahorros (CPA), aunque no dio precisiones acerca de cómo se verá afectada la actividad en el resto de la city local. "Recibimos el apoyo de los empleados de todas las entidades bancarias, pero no se definió si dejarán de atender al público por una o dos horas", advirtió.
Lo que sí está claro, según el dirigente, es que los bancos permanecerán abiertos, pero que los afiliados a La Bancaria se solidarizarán con la protesta de los trabajadores de la Caja cerrando sus ventanillas desde el momento en que abran sus puertas. Es decir que, entre las 8 y las 10 de hoy, la actividad bancaria podría ser irregular.
Así, la disputa entre la dirigencia de la Bancaria y el interventor de la CPA, Armando "Cacho" Cortalezzi, sumará un nuevo capítulo. "No podemos permitir el saqueo del Gobierno de (José) Alperovich, que sacó $ 172 millones de la Caja, ni tampoco podemos aceptar la persecución a la que son sometidos los empleados de la entidad por parte del interventor y sus secuaces", fustigó Bourlé. De acuerdo con la versión del dirigente, desde que Cortalezzi asumió la intervención de la CPA se multiplicaron los aprietes.
La medida
El paro en las oficinas de la Caja comenzará a las 7. "A las 10 haremos una radio abierta en la puerta de la Caja y seguiremos protestando durante toda la jornada laboral", aseveró el secretario general del gremio.
El clima entre las partes está caldeado y en sus declaraciones abundan las acusaciones cruzadas. "El interventor controla a los empleados a las 8, a las 10 y a las 14. Con todo el tiempo que ocupa persiguiendo la actividad sindical no se qué tiempo le queda para trabajar", azuzó Bourlé.
A su vez, Cortalezzi denunció que ayer, luego de una asamblea que condujo el dirigente Carlos Cisneros en la casa central de la CPA, los bancarios atacaron a un grupo de empleadas. "Hay nueve denuncias de mujeres que fueron agredidas e insultadas. Dejan mucho que desear porque todo lo que hacen es contrario a lo que debería hacer un representante gremial que defiende los derechos de los trabajadores", atacó el interventor.
Otra de las disputas gira en torno a la legalidad del paro. Cortalezzi cerró filas y obtuvo una resolución de la Secretaría de Trabajo, a cargo de Roberto Jiménez, en la que se determina que la protesta es ilegal. Sin embargo Bourlé defendió la legalidad del reclamo. "El paro fue avalado por la Bancaria nacional y fue planteado en el Ministerio de Trabajo de la Nación, que es la autoridad a la que le compete dirimir en este tipo de protestas. La Secretaría de Trabajo local es del Gobierno de Alperovich y, en este caso, no tiene competencia", retrucó.
Lo que sí está claro, según el dirigente, es que los bancos permanecerán abiertos, pero que los afiliados a La Bancaria se solidarizarán con la protesta de los trabajadores de la Caja cerrando sus ventanillas desde el momento en que abran sus puertas. Es decir que, entre las 8 y las 10 de hoy, la actividad bancaria podría ser irregular.
Así, la disputa entre la dirigencia de la Bancaria y el interventor de la CPA, Armando "Cacho" Cortalezzi, sumará un nuevo capítulo. "No podemos permitir el saqueo del Gobierno de (José) Alperovich, que sacó $ 172 millones de la Caja, ni tampoco podemos aceptar la persecución a la que son sometidos los empleados de la entidad por parte del interventor y sus secuaces", fustigó Bourlé. De acuerdo con la versión del dirigente, desde que Cortalezzi asumió la intervención de la CPA se multiplicaron los aprietes.
La medida
El paro en las oficinas de la Caja comenzará a las 7. "A las 10 haremos una radio abierta en la puerta de la Caja y seguiremos protestando durante toda la jornada laboral", aseveró el secretario general del gremio.
El clima entre las partes está caldeado y en sus declaraciones abundan las acusaciones cruzadas. "El interventor controla a los empleados a las 8, a las 10 y a las 14. Con todo el tiempo que ocupa persiguiendo la actividad sindical no se qué tiempo le queda para trabajar", azuzó Bourlé.
A su vez, Cortalezzi denunció que ayer, luego de una asamblea que condujo el dirigente Carlos Cisneros en la casa central de la CPA, los bancarios atacaron a un grupo de empleadas. "Hay nueve denuncias de mujeres que fueron agredidas e insultadas. Dejan mucho que desear porque todo lo que hacen es contrario a lo que debería hacer un representante gremial que defiende los derechos de los trabajadores", atacó el interventor.
Otra de las disputas gira en torno a la legalidad del paro. Cortalezzi cerró filas y obtuvo una resolución de la Secretaría de Trabajo, a cargo de Roberto Jiménez, en la que se determina que la protesta es ilegal. Sin embargo Bourlé defendió la legalidad del reclamo. "El paro fue avalado por la Bancaria nacional y fue planteado en el Ministerio de Trabajo de la Nación, que es la autoridad a la que le compete dirimir en este tipo de protestas. La Secretaría de Trabajo local es del Gobierno de Alperovich y, en este caso, no tiene competencia", retrucó.
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