Por Fernando García Soto
02 Febrero 2013
La decisión del Gobierno provincial de impulsar una ley que garantice el cumplimiento de las exportaciones de azúcar cobró relevancia por estos días, cuando la actividad productiva que aporta los mayores dividendos de que se nutre la economía de Tucumán languidece a causa de precios de quebranto que afectan desde hace un año a industriales y cañeros. Dada la relevancia que este sector tiene en el bolsillo de todos los tucumanos, la temática sucroalcoholera siempre tiene espacio en LA GACETA, que hoy lleva a la tapa el pedido -recurrente- del gobernador, José Alperovich, para que los dueños de los ingenios se pongan de acuerdo a fin de exportar los excedentes productivos que afectan los precios internos. El Gobierno necesita que la actividad gane firmeza para poder afrontar un año que, se presume, sería difícil para la economía provincial.
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