¿Cartel de platino al estilo OPEP? Una quimera

19 Mayo 2013

Ed Stoddard - Reuters

JOHANNESBURGO, Sudáfrica.- Sudáfrica equivale a la Arabia Saudita del platino. Pero Pretoria jamás podría manipular el precio de este elemento de la manera en que el reino de Medio Oriente puede influenciar en el del petróleo y hablar de un cartel de platino, quizás al estilo de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). Es una quimera. Los mayores productores de platino del mundo, Sudáfrica y Rusia, acordaron lidiar con los excesivos suministros del metal mediante un memorando de entendimiento firmado en marzo, durante la reunión que mantuvieron las potencias de mercados emergentes BRICS, en Durban. La ministra de Minas de Sudáfrica, Susan Shabangu, habló de "equilibrar" en lugar de "controlar el mercado" aunque expresó preocupación por el exceso de suministros y por los precios. Pero funcionarios rusos dijeron que influenciar en los costos no era el objetivo. Pero, ¿cuál sería entonces el fin último de la cooperación entre los centros neurálgicos de platino, en especial si el objetivo manifestado por una de las partes es "equilibrar" el mercado? Esto ha desatado la especulaciones sobre cómo podrían controlarse los suministros para elevar los precios del metal blanco utilizado para construir conversores catalíticos, cuyo fin es restringir las emisiones en los automóviles.

Las conversaciones han abarcado desde un modelo estilo OPEP hasta algo mucho más modesto, más bien parecido a la cooperación comercial, pero es improbable llevar a cabo cualquier idea dado que las industrias de crudo y platino son como el agua y el aceite. Para empezar, la producción de crudo en Arabia Saudita está firmemente en manos del Estado mediante la petrolera estatal Aramco.

En los últimos años, el reino ha sido casi el único país en reducir su producción mientras otros miembros se abstuvieron, debido a las preocupaciones sobre una pérdida de ingresos. Sudáfrica podrá contar con un 80% de las reservas conocidas de platino del mundo pero, a diferencia de Arabia Saudita, no posee una compañía estatal que extraiga esos recursos. Por lo tanto, cualquier llamado a un recorte de producción tendría que contar con el respaldo de varias compañías, en especial los tres grandes productores del metal precioso: Anglo American Platinum (Amplats), Impala Platinum y Lonmin.

A las firmas les gustaría reducir algo de su producción para impulsar sus alicaídos precios. El valor al contado del platino cotizaba en U$S 1.469,74 la onza, una baja del 34% desde niveles récord de U$S 2.240 en marzo de 2008. Pero sus manos están atadas en una serie de frentes, y el primero es el político. El Gobierno podrá estar preocupado por los suministros y por los precios, pero tampoco quiere recortes en la producción debido a que se perderían empleos. Amplats, que busca recuperar sus ganancias tras registrar pérdidas el año pasado, tuvo que reducir una meta inicial de 14.000 despidos ante la firme resistencia de los sindicatos, del Poder Ejecutivo y del gobernante Congreso Nacional de África (CNA). (Reuters)

Publicidad
Tamaño texto
Comentarios
Comentarios