20 Mayo 2013
WASHINGTON.- La incautación por parte del Departamento de Justicia de EEUU de los detalles telefónicos de periodistas de Associated Press (AP) está perjudicando la capacidad de la agencia para recabar noticias, señaló ayer el presidente ejecutivo del grupo mediático, Gary Pruitt.
"Funcionarios que normalmente hablarían con nosotros y personas que hablan en el curso normal del acceso a noticias ya están renuentes a conversar con nosotros", afirmó Pruitt en el programa Face The Nation de la CBS. "Ellos temen ser vigilados por el Gobierno", dijo.
El Departamento de Justicia informó a AP el 10 de mayo que incautó registros de más de 20 líneas telefónicas de la agencia durante abril y mayo de 2012. Los detalles de llamados son parte de una investigación sobre filtraciones a medios de un frustrado complot terrorista. "Unos 100 periodistas usan estas líneas para recabar noticias", dijo Pruitt. "Y en estos dos meses de registros, se hicieron miles y miles de llamados para obtener información", añadió.
La Casa Blanca señaló que el presidente Barack Obama se enteró del hecho por reportes de la prensa y que no tenía conocimiento previo de la medida.
Pruitt apuntó que el Departamento de Justicia hizo una excepción a sus propios reglamentos que le obligaban a notificar a AP sobre la toma de sus registros telefónicos. "No cuestionamos su derecho a conducir este tipo de investigaciones. Pensamos que lo hicieron de forma incorrecta, secreta, avasalladora y abusiva", indicó Pruitt. (DPA)
"Funcionarios que normalmente hablarían con nosotros y personas que hablan en el curso normal del acceso a noticias ya están renuentes a conversar con nosotros", afirmó Pruitt en el programa Face The Nation de la CBS. "Ellos temen ser vigilados por el Gobierno", dijo.
El Departamento de Justicia informó a AP el 10 de mayo que incautó registros de más de 20 líneas telefónicas de la agencia durante abril y mayo de 2012. Los detalles de llamados son parte de una investigación sobre filtraciones a medios de un frustrado complot terrorista. "Unos 100 periodistas usan estas líneas para recabar noticias", dijo Pruitt. "Y en estos dos meses de registros, se hicieron miles y miles de llamados para obtener información", añadió.
La Casa Blanca señaló que el presidente Barack Obama se enteró del hecho por reportes de la prensa y que no tenía conocimiento previo de la medida.
Pruitt apuntó que el Departamento de Justicia hizo una excepción a sus propios reglamentos que le obligaban a notificar a AP sobre la toma de sus registros telefónicos. "No cuestionamos su derecho a conducir este tipo de investigaciones. Pensamos que lo hicieron de forma incorrecta, secreta, avasalladora y abusiva", indicó Pruitt. (DPA)